A Paola Vega, diputada del Partido Acción Ciudadana (PAC), no le hizo mucha gracia que en la sesión especial que el Plenario efectuó este jueves en la provincia limonense, la organización llevara a tres autoridades de las iglesias de la zona para realizar una oración.
En medio de un receso, al poco de haber iniciado la sesión que ordenó la presidenta del Congreso, Carolina Hidalgo, la vocera de la Municipalidad de Limón invitó a los tres religiosos para que pasaran al frente.
Se trató de Hensley Johnson Dadd, presidente de la Asociación de Ministros y ministras de las Iglesias Cristianas Históricas de la provincia de Limón; monseñor Javier Román, arzobispo de la Diócesis de Limón; el obispo y reverendo Dennis Barrios Gómez, presidente de la Fraternidad de Pastores de Limón.
Los 48 legisladores que se encontraban en la explanada del edificio municipal se pusieron de pie con excepción de Vega, que permaneció sentada utilizando su celular.
Johnson hizo la oración en español y en inglés, pidió bendiciones para todos los caribeños.
Monseñor Román solicitó rezar el tradicional Padre Nuestro, mientras que el obispo Barrios oró por la bendición a los distintos cantones, por los jóvenes, la falta de empleo en la provincia y los gobernantes locales.
Minutos después, la congresista mostró su gran molestia en su cuenta personal de Twitter, donde escribió: “Me honra realizar este Plenario en Limón y compartir (con) el pueblo limonense. Pero no puedo dejar de advertir que no debió iniciar esta sesión con un acto religioso y una oración. Es este un acto oficial y laico. La necesaria separación es necesaria y vital. Un Estado Laico urge”, escribió la oficialista.
FUERTES CRÍTICAS
La actitud de Vega no fue bien vista por los diputados de Restauración Nacional, sumado a las fuertes críticas que recibió en las redes sociales, donde la calificaron de irrespetuosa y maleducada.
Para el parlamentario Jonathan Prendas, el acto de la oración con la representación de estas autoridades religiosas fue un atino al reflejar uno de los aspectos de la cultura limonense.
“Con ese comentario (de la diputada), el PAC nuevamente le da la espalda a la cultura limonense; es así como se entiende que ese partido no tenga ni un diputado en la provincia. Es lamentable que su fanatismo por ver como malo lo espiritual no los deje ver que esa es uno de los pilares de la identidad de este pueblo”, apuntó Prendas.
Lo apoyó su compañero de bancada, Eduardo Cruickshank, también representante de la provincia.
“Pretender que la mayoría del pueblo es ateo y quiere un Estado laico se aleja de la verdad, si nosotros queremos que nos vaya bien en las cosas debemos poner a Dios en el primer lugar, y lo de hoy es una práctica aquí en Limón y eso se quiso mostrar y por eso se trajo a un sacerdote católico, a un pastor evangélico y pudieron orar sin ninguna diferencia, porque Limón es un pueblo muy cristiano y no podía ser diferente”, explicó.
¿RESPETO?
Consultada sobre su posición, Vega dijo a los medios que ella es respetuosa de las distintas religiones.
“Yo soy totalmente respetuosa de las diversas religiones, especialmente en una provincia como Limón, que tiene una tradición ecuménica y pluricultural bastante importante y significativa, sin embargo, soy fiel defensora que los actos del Estado y de los poderes de la República deben ser totalmente laicos y no pueden empezar con una oración o acto religioso”, adujo.
Vega agregó que el Estado laico es una promesa de campaña del partido que seguirá defendiendo desde la Asamblea Legislativa, ya que los jóvenes lo piden y Costa Rica es de los pocos en continuar con un Estado confesional, donde existe una religión oficial.
TICOS OPINAN
• Juan José Matius
Guadalupe
“A parte de las creencias que ella pueda tener, me parece una falta de respeto, porque lo menos que pudo hacer fue respetar ese momento y cumplir con el requisito de ponerse de pie”.
• Cristian Castro
Alajuela
“Yo lo veo como una falta de respeto al no querer ella ponerse de pie, porque ante todo está el respeto, aunque uno no comparta”.
• Stephanie Poveda
Desamparados
“Es una falta de respeto porque, aunque ella no comparta esa religión, no puede quedarse ahí sentada jugando con el teléfono, se está burlando de Dios principalmente”.