La mayoría de niños ve a su abuelito con ternura, amor y le tienen toda la confianza del mundo, sin embargo cinco niñas de entre 7 y 12 años dejaron esa percepción pues su “tito” aparentemente las violó y se convirtió en su peor pesadilla.
Este despreciable caso fue investigado por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Monteverde de Puntarenas luego de recibir la denuncia de los padres de los niños.
Tras hacer el trabajo pertinente, los agentes detuvieron al hombre de apellido González (de 58 años) como sospechoso de los abusos contra sus nietas.
El tipo, quien trabaja en una empresa procesadora de piña, fue detenido en Sardinal de Puntarenas, en el barrio Corazón de Jesús, lugar donde se presume habría cometido los sucios delitos contra las indefensas menores de edad.
Los judiciales, para poder arrestarlo, hicieron una “visita” sorpresa a su lugar de trabajo, donde frente a sus jefes y compañeros le pusieron esposas en sus manos y lo montaron al vehículo del Poder Judicial para trasladarlo hacia la Fiscalía de Puntarenas, allí deberá responder por los delitos por los cuales se le aprehendió.
APROVECHÓ
LA SOLEDAD
Los agentes determinaron, mediante la investigación, que el abuelo aprovechaba que las pequeñas pasaban mucho tiempo solas en la casa para visitarlas frecuentemente.
El presunto violador sabía a la hora que los padres de las chiquitas regresaban del trabajo, por lo que medía el tiempo que tenía para someterlas a actos sexuales.
Algunos vecinos de las víctimas escucharon los abusos, por lo que hablaron con los papás de las niñas y se basaron en eso para preguntarle a las niñas sobre lo que pasaba.
Una vez que las niñas contaron las cochinadas a las que fueron sometidas por su abuelo, los papás junto a los vecinos que sirvieron como testigos fueron hasta el OIJ y Fiscalía para poner la denuncia, por medio de la cual se logró detener al sospechoso.