El Vaticano desmintió que el papa emérito Benedicto XVI se encuentre gravemente enfermo como aseguraron la víspera medios de prensa españoles, esto tras aparecer muy agotado durante el histórico encuentro a finales de marzo con su sucesor, el argentino Francisco. Los rumores aumentaron por las dificultades que mostró al caminar, encorvado y ayudado por un bastón.