El desfile de los trabajadores del 1 de mayo será multitudinario porque se celebra en torno a muchos conflictos sociales y hay enojo popular contra la clase gobernante, vaticinó ayer Albino Vargas, secretario general de la Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP).
Para Vargas sobran las razones para augurar que este 1 de mayo será muy participativo y va más allá de que este año se cumplen 100 años de que esta fecha se celebra en Costa Rica porque se han juntado muchas agendas de lucha, que van desde la concesión de la ruta a San Ramón, la defensa de la Caja, el veto que le hizo el gobierno a la reforma laboral, la construcción de la trocha y la negativa del Poder Ejecutivo a modificar la “Ley mordaza”.
“Siempre hemos de insistir en que a la clase trabajadora costarricense le hicieron el asalto más grande de nuestra historia como nación: el que los sectores gobernantes mezclaran la histórica celebración mundial del 1 de mayo, concebido como el Día Internacional de la Clase Trabajadora, con el ritual de la institucionalidad republicana dominante, que acontece dentro de los muros del Parlamento costarricense: la famosa elección del Directorio legislativo y la lectura del mensaje presidencial de rendición de cuentas”, manifestó.
Para Vargas algún día se materializará la necesaria reforma constitucional que permita a “los y las de abajo”, especialmente a quienes son parte de la clase trabajadora, celebrar esta fecha tal como se hace en prácticamente todo el planeta: sin mezclarlo con ningún otro acontecimiento.
“Al acercarse la emblemática fecha del 1 de mayo de 2013, en próximos días, a 100 años de la primera conmemoración que hubo en Tiquicia de esta, repetimos, gigante epopeya obrera mundial, hay que rendir homenaje a los ilustres costarricenses Joaquín García Monge y Omar Dengo; a la insigne luchadora social y escritora costarricense Carmen Lyra, mujer gigante de la historia patria, de la cual tan solo se nos dice que escribió \’Los cuentos de mi tía Panchita\’, porque si se mencionara en toda su dimensión su militancia político-social de toda una vida, sería subversivo para las nuevas generaciones juveniles de hoy.
¡Cuántas razones tenemos para salir a la calle este 1 de mayo! ¡Cuántas demandas, denuncias y propuestas podemos reivindicar en nuestras mantas, cartulinas, panfletos, folletos y volantes; a viva voz, en las tumbacocos y en los megáfonos!”, manifestó el sindicalista.