Después de dos años de mandato, la administración Chaves Robles sigue gozando de un apoyo superior al 50%, según el análisis del Centro de Investigación y Estudios Políticos (CIEP) de la Universidad de Costa Rica (UCR).
Este escenario se presenta a pesar de las denuncias contra el Gobierno, las más de 50 causas penales, constantes ataques a la prensa y el fuego cruzado entre los tres poderes de la República, pero ¿por qué?
Según explicó el sociólogo Francisco Barahona a DIARIO EXTRA, la apatía que siente la mayoría de costarricenses hacia los partidos políticos alimenta la confianza que parte de la población mantiene en el presidente.
Esto pese a que, según el experto, Rodrigo Chaves ya tendría que considerarse como parte de esa “casta política” porque ya lleva más de dos años al frente del país.
“Tenemos años de estar desacreditando lo que se llama la clase política, que el presidente llama ‘casta política’, entonces todavía prima esa decepción en los partidos políticos y esa creencia de que ha habido una alta dosis de corrupción. Entonces usted ve ahí una enorme desafección hacia la clase política y hacia los partidos políticos.
Sobre eso se han montado el presidente y mucha de la gente que todavía lo apoya, una parte de la gente con ese corazón duro que no mezcla, sino que pone a Chaves como si fuera un salvador y no se da cuenta de que él es parte de la casta”, señala Barahona.
Pese a esto, el sociólogo agrega que, basándose en los resultados del CIEP, tampoco es muy cierta esa creencia de que la mayoría del pueblo le cree a Chaves, pues argumenta que se contempla un rechazo a la Ley Jaguar, uno de sus proyectos estrella.
Asimismo, indica que las declaraciones del miércoles 25 de setiembre en Casa Presidencial tras los allanamientos por el caso Barrenador también pueden restarle puntos de confianza entre la ciudadanía.
FE CIEGA
Por su parte, el sociólogo José Carlos Chinchilla explicó que el estilo del presidente lo vuelve carismático y cuando las personas creen en alguien por su carisma, sea bueno o malo como gobernante, empiezan a tener una fe ciega en esa figura.
“Hay un grupo de gente que en Costa Rica estaba desencantada de la política por los gobiernos anteriores y en ese desencantamiento lo que hace es acoger a la primera persona que le ofrece algo dentro de su discurso que le agrada o le llama la atención”, indicó.
Asimismo, comenta que gran parte de sus seguidores son personas que han sido olvidadas por la clase política y aunque Chaves no aporta soluciones a sus realidades, está trabajando por ello.
“Esa critica que él realiza a la institucionalidad es muy creíble por la gente, porque como pocas veces han hecho algo por esas personas, es creíble que las instituciones están contra los sectores necesitados, aunque no necesariamente sea así”, expuso.