Karine Niño, diputada del Partido Liberación Nacional (PLN) y presidenta de la Comisión Permanente de Asuntos Internacionales, valora desechar la reforma al Estatuto del Servicio Exterior.
De acuerdo con la liberacionista, pasado el periodo de vacaciones se reunirá con la bancada verdiblanca y con su jefa de fracción, Silvia Hernández, para pedir consejo sobre el futuro del expediente 21.235.
¿La razón? Niño asegura estar cansada de una campaña de desprestigio en su contra que involucra desde diplomáticos de carrera hasta medios de comunicación y otros diputados. Criticó la postura poco constructiva de algunos miembros de la Asociación Costarricense de Diplomáticos de Carrera (ACDC).
“Lo que me llama poderosamente la atención es primero la falta de respeto. Hay falacias que se han venido diciendo. Lo que están haciendo es deslegitimar el trabajo que se ha venido haciendo en los últimos dos meses. La ACDC definitivamente es un sindicato de gente que quiere que las cosas en la Cancillería se queden tal como están”, denunció.
MOLESTIA
La molestia de la congresista surge luego de un comunicado que liberó la Asociación, en el que abogaban por una ley que respetase la profesionalización de la carrera diplomática.
“La ACDC externa su profunda preocupación por la propuesta de establecer cuotas por ley en el proyecto, que tienen por objetivo el nombramiento de personas en el Servicio Exterior sin que hayan cumplido con los procesos de incorporación a la carrera diplomática.
La propuesta contraviene las disposiciones de la Ley 3550 y abre un portillo para crear un régimen o estructura paralela a la carrera diplomática, con un criterio de carácter político al espíritu de la ley vigente por la que se creó la carrera diplomática costarricense”, se lee en el pronunciamiento.
Al respecto la legisladora sentenció que lo único que se abordó en la última sesión de trabajo es ver la posibilidad de que el Estado pueda darles una plaza a personas que llevan años vinculadas al Servicio Exterior, pese a que no son de carrera.
Lo anterior entendiendo que no podían afectarse las plazas para diplomáticos de carrera, ni el presupuesto de la Cancillería.
También dijo que la posibilidad es tan prematura que ni siquiera tienen un nombre en el caso de avanzarse en ese sentido, de ahí su molestia con ciertos funcionarios.
“Estoy cansada de la actitud de la gente que no es constructiva y lo que hacen es salir corriendo a desvirtuar y deslegitimizar mi trabajo a través de algunos medios. Estoy convencida de que la ACDC es un sindicato, que esa es su forma de trabajar y lo que hacen para deslegitimizarme, porque a ellos les conviene más quedarse como están, en ese desorden”, agregó.
Niño encaró también la postura de María Inés Solís, jefa de fracción del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), luego de que la legisladora supuestamente hablara mal del trabajo que ha encabezado con el expediente 21.235.
“Me sorprende también la actitud de diputadas como María Inés, donde sus asesores han estado en las sesiones de trabajo, pero como ella no está al tanto de nada se quita el tiro políticamente y sale a decir lo que la gente quiere oír sobre el tema”, finalizó.