Los casos de agresiones en los centros educativos no cesan en el país, en esta ocasión se denuncia uno en la escuela Pilar Jiménez, ubicada en Guadalupe, lo que mantiene con gran indignación a los padres de familia.
En la institución del Ministerio de Educación Pública (MEP), se reportó un caso de violencia, pero en esta oportunidad no fueron los estudiantes quienes efectuaron los hechos, sino una maestra de religión, quien al parecer no midió sus alcances a la hora de enseñar.
Las víctimas fueron integrantes de un grupo de segundo año, que, según las denunciantes, la docente al parecer les gritó, les agarró los cachetes y hasta les pegó por las manos a dos niñas.
DIARIO EXTRA se presentó al lugar para conocer la situación de primera mano y tres madres no dudaron en señalar la presunta mala actuación de la maestra.
Además, el Periódico de Más Venta en Costa Rica tuvo acceso a los documentos de las denuncias, que las madres en su preocupación pusieron ante la escuela.
Cabe resaltar que buscaron elevar el asunto ante las autoridades judiciales, pero se les indicó que el protocolo era hacerlo primero ante el MEP por lo que no se les fue aceptada.
Pese a ello, buscaron la manera de hacerse notar y que el caso no pase desapercibido en la comunidad estudiantil.
AGRESIÓN A MENORES
Las progenitoras, quienes para evitar represalias en contra de las menores y de ellas como encargadas legales solicitaron que sus identidades fueran protegidas, relataron lo que habría sucedido en el centro educativo.
“Ella viene de la escuela y le cuenta a la abuelita lo que había pasado y entra en un cuadro de histeria, con llanto, y me cuenta que la maestra de religión les alza el tono con gritos.
Por lo que hablé con otras mamás y sí, me confirman que las compañeritas de mi hija efectivamente coinciden en que la maestra les grita, y que a una de ellas le llegó a pegar”, dijo la mamá de una de las afectadas.
Otra madre también contó la situación: “Cuando mi hija no captó la instrucción, se levanta del pupitre y le dice a la maestra que, si le hace el favor de volverle a explicar, en ese momento la maestra se volvió loca, empezó a pegar gritos y a decir que ya ellos eran niños de segundo, que estaban tamaño ‘huevones’ para no entender.
Mi hija al ver eso entró en un ataque nervioso y se puso a llorar, la maestra cuando la ve se dirige al pupitre y le agarra las mejillas”, externó la mamá de una de las afectadas.
La madre encargada de emitir la denuncia formal explicó al Diario del Pueblo lo que acusó de la docente: “mi hija fue agredida físicamente por la maestra, la cual siempre ha tenido un trato grosero con los estudiantes, pero nunca había pasado nada considerado grave, pero ese día mi hija de siete años fue a hacerle una consulta y después de pegarle gritos le agarró la mano izquierda y le pegó”.
Además, en el documento de la denuncia que está en poder de DIARIO EXTRA, la madre alegó que la docente en tono intimidante le pidió a la clase que no dijeran nada acerca de lo ocurrido a la maestra a cargo de las materias básicas.
Incluso, una de las compañeras de la víctima de agresión intentó defender a la niña, por lo cual también recibió gritos por parte de la docente cuestionada.
¿QUÉ DICE LA ESCUELA?
DIARIO EXTRA se comunicó vía telefónica y correo electrónico con empleados de la institución para conocer la opinión de la directora del centro educativo. Sin embargo, mediante un correo manifestaron que no iban a brindar explicaciones ni declaraciones de lo sucedido.
Tampoco indicaron si existía algún tipo de procedimiento ante la denuncia que efectuaron los padres de familia.
Acotaron que no eran ajenos a la situación, ya que en una reunión diferentes padres y encargados dieron a conocer la inconformidad, incluso optaron por enviar cartas para que los estudiantes no recibieran lecciones religiosas con la maestra sospechosa de cometer los actos, como medida de prevención para que los estudiantes no se expongan a algún tipo de violencia como la denunciada debidamente ante el Departamento Administrativo.
POSICIÓN DEL MEP
Por su parte, el MEP, mediante Gener Mora, director regional de San José Norte, manifestó: “por respeto a las menores y a la docente de la institución, será el departamento disciplinario el que determine en su investigación los hechos que se denunciaron”.
Según indicó el Director Regional, como parte de las medidas que han tomado a nivel institucional destacan reubicar momentáneamente a la maestra, mientras se realiza la investigación correspondiente.
También se le consultó a la ministra de Educación Anna Katharina Müller sobre la situación, a lo que alegó que no estaba enterada pero que iba a mantenerse pendiente de la investigación, porque sin una resolución no podía emitir un criterio.