En el club morado existe un antecedente con Juan Bautista Esquivel, quien el 2 de febrero de 2006 tuvo que anunciar su retiro por una afección coronaria.
Guadalupe.- El Saprissa regresó a los entrenamientos ayer con el único objetivo de alcanzar el ansiado título, que no llega desde hace tres años, pero lo que más llamó la atención en casa tibaseña es que el defensor Gabriel Badilla al parecer tendría un problema cardiaco, por eso no se entrenó con el resto de sus compañeros.
Trascendió que el mal cardiaco sacaría de las canchas al “Gladiador” morado, como se le conoce al zaguero por su pundonor para jugar al fútbol y las ganas que le imprime dentro del terreno de juego.
En el club morado existe un antecedente con Juan Bautista Esquivel, quien el 2 de febrero de 2006 tuvo que anunciar su retiro por una afección coronaria.
Si se confirmara el padecimiento del zaguero, el “Monstruo” perdería a un hombre de experiencia y liderazgo, que sin ninguna duda haría falta en los planes del técnico Ronald González.
Ante esto el médico saprissista Esteban Campos maneja el tema con mucha cautela para mantener la paz en el vestuario, pero recalcó que le realizan valoraciones al jugador para conocer con certeza lo grave de su padecimiento y si puede seguir jugando al fútbol de manera profesional.
“Ha surgido una preocupación y algunos comentarios específicos en el caso de Gabriel Badilla, nosotros queremos ser muy respetuosos con el tema. Aún no tenemos resultados concretos, estamos pendientes de los que saldrán en las próximas horas”, indicó el galeno.
Campos no quiso entrar en muchos detalles a cerca del padecimiento del exmundialista de Alemania 2006, afirmando que entre hoy y mañana hablarán del asunto con lujo de detalles para informar a la afición morada sobre el estado de salud del “Gladiador”.
“Esperamos que en unas 24 o 48 horas estén los resultados de los especialistas para tener un panorama claro y hablar con honestidad y franqueza. Aún no queremos hablar por respeto al jugador, a la institución y a los aficionados”, acotó.
CASOS INTERNACIONALES
En Costa Rica ningún jugador ha muerto por problemas cardiacos durante un partido de fútbol, sin embargo en otros países los casos abundan, como fue el del seleccionado camerunés Marc Vivien Foe, quien en la Copa Confederaciones del 2003 perdió la vida al desplomarse.
Lo mismo le sucedió al húngaro Miklos Féher en 2004 en un partido que disputaba con su club, el Benfica de Portugal. Y así otros casos que conmocionaron al fútbol mundial.
El 60% de los futbolistas muertos por múltiples complicaciones cardiacas tenía entre 18 y 27 años.