Luego de que El Periódico de Más Venta en Costa Rica diera conocer que el edificio de la Delegación Policial de Tibás fue clausurado al taquearse las tuberías y contaminar con “mierda” las instalaciones y la comida, Nils Ching, subdirector de la Fuerza Pública, explicó que el departamento de estructura de edificios del Ministerio de Seguridad Pública (MSP)estará trabajando. En efecto, el Ministerio de Salud aportará un ingeniero para determinar la situación real del inmueble.
El tema no es nuevo, se entiende que el edificio de 4 plantas tiene un tránsito de unas 5 personas por piso; en él circulan unas 50 personas, eso duplicó la cantidad permitida, por lo que era de esperarse tal situación. Tampoco se desperdiciaron 4 millones en comida, la cantidad es menor, pero no se precisó el total, relató Ching.
Según el subdirector, el edificio es alquilado, el arrendador es el responsable de suministrar instalaciones adecuadas, en este caso ellos esperarán los informes técnicos; sin embargo, se valora la posibilidad de cambio de domicilio. Dejó en claro que el servicio a la población continuará.
Por su parte, Guillermo Flores Galindo, director de la Regional Sur del Ministerio de Salud, explicó que sus palabras fueron sobredimensionadas, pues nunca dijo que los “policías de Tibás comían mierda”.
Flores aseguró que el jueves el problema continúo y por tal motivo seguirá clausurado el inmueble.
“Como parte del seguimiento, este jueves continuamos con las pruebas y se vertió una sustancia llamada fluorescencia, la cual es una química especial usada para problemas de filtración de aguas, se echó en los servicios sanitarios, prueba que resultó positiva, por lo que se identificó que el problema continuaba y bajo esa premisa continuará clausurado”, explicó Flores.
Por otro lado, Minor Anchía de la seccional de ANEP en el MSP, indicó que ahora el problema es que los oficiales están durmiendo en en el piso, los están trasladando a otras delegaciones donde no tienen espacio, incomodándose unos y otros y las comidas se desperdician, tal como ocurrió con 20 desayunos en Copey.
Por ahora, solo resta esperar las pruebas y las correcciones; de hecho, hasta que no estén terminadas las reparaciones y el dueño del inmueble lo anuncie al Ministerio de Salud, estos no mandarán a realizar más pruebas.