Guillermo Gardela Román sobrevivió a las puñaladas que recibió tras la pelea con su vecino Cristóbal Sánchez Pérez, de 37 años. Tal como lo publicó DIARIO EXTRA en su edición de ayer, este último falleció en un lote de Portalón, Quepos, cuya propiedad aparentemente disputaban.
Gardela, quien permanecía bajo custodia policial en una cama del Hospital Dr. Max Terán, recibió la salida y de inmediato fue pasado a las celdas del OIJ de Quepos, donde lo pusieron a las órdenes del Ministerio Público, permanece a la espera de medidas cautelares.
La fiscalía hasta la tarde de ayer lo mantenía como sospechoso del delito de homicidio simple, sin embargo no descartaba cambiar de delito porque de acuerdo con lo que informó estaba a la espera de otras pericias.
Sin embargo la familia de “Tobo”, como le decían al fallecido, pide que a Gardela se le aplique todo el peso de la ley por quitarles un pariente.
“No es justo que un hombre vaya a hacer una cosa de esas y menos de la forma que lo hizo, días atrás habían tenido una riña y la policía intervino en la situación.
Estamos dispuestos a hacer todo lo necesario para que la justicia caiga sobre ese sujeto. Creemos que el daño también lo podría cometer contra otras personas”, aseguró José Luis Sánchez, hermano de la víctima.
Celtin Umaña, vecino de los involucrados, dijo que la rencilla de ambos venía desde hace meses. “Habían acumulado mucha discordia, pues desde hace dos meses se veían e inmediatamente se ofendían”, narró.
Vilma Fallas, otra lugareña, afirmó que Sánchez presentía su muerte, pues se le veía afligido. “Estuvo en la casa de su hermano, se veía muy sufrido, parecía que sentía la muerte. Su hermano Isidro le dijo que no fuera a recoger sus cosas, que luego él lo acompañaba, sin embargo no lo escuchó y terminó en este lamentable hecho”, declaró.
Al cierre de edición las autoridades que llevan este homicidio se mantenían en audiencia y hasta ayer no habían dictado medidas cautelares.