Un total de 21 balazos recibió el guarda de seguridad Randall Jesús Rojas Soto, de 24 años de edad, durante un asalto al Banco Nacional de Río Frío en Sarapiquí el 12 de octubre de 2020.
Así lo dice la acusación leída por la fiscal Yolanda Jiménez, en el inicio del juicio que se lleva en contra de cinco imputados de nombres Andrey Mauricio Gómez Céspedes, David Francisco Serrano Cerdas, Jeremy Alexander Velázquez Pérez, Josué Gonzalo Rodríguez Céspedes y Maikel Daniel González Solís por ser sospechosos de cometer asociación ilícita, homicidio calificado y tentativa de robo agravado.
“Con la finalidad de asegurar la sustracción de bienes ajenos y con plena intención homicida en total desprecio contra la vida humana, mediante el uso de arma de fuego dispararon contra la humanidad del ofendido, mismo que presentó 21 heridas por proyectil de arma de fuego distribuidas en la cabeza, tórax, abdomen, torso, extremidad superior derecha, extremidad superior izquierda, extremidad inferior derecha”, dijo la representante del Ministerio Público. Además, durante el primer día de la audiencia se llamó como testigo a Jafet José Alcocer, supervisor operativo del Banco Nacional y quien se encontraba en el momento del asalto. Relató que inicialmente dos hombres ingresaron a las instalaciones de la entidad financiera con actitudes sospechosas.
“Le dije a un compañero que por favor estuviera atento por si pasaba cualquier situación para que bloqueara las puertas y fue cuestión de 20 o 30 segundos cuando sonó el primer disparo”, relató.
El juicio se está realizando en el II Circuito Judicial de San José y tendrá 29 testimonios.
EL CASO
Los hechos durante los cuales murió el guarda de seguridad se produjeron a las 8:52 a.m. en la sucursal del Banco Nacional ubicada en Finca 6 de Río Frío, distrito Horquetas, cantón Sarapiquí.
Al parecer dos hombres llegaron a la entidad bancaria haciéndose pasar por clientes, pero en realidad pretendían avisar cómo era el movimiento dentro de la sucursal.
Después, al lugar llegaron otros tres sujetos, quienes entraron al lobby disparando e impactaron al vigilante en múltiples ocasiones, pero no lograron ingresar al banco pues las puertas se bloquearon. De inmediato decidieron escapar del sitio, mientras que los funcionarios dieron la alerta a las autoridades policiales, que iniciaron un amplio operativo en la zona para dar con los pistoleros, hasta que lograron detener a los ahora acusados.
Por este caso un menor de edad de 17 años, quien también era sospechoso del homicidio y el intento de asalto, se encuentra en prisión tras acogerse a un proceso abreviado.