Lima, Perú. (AFP) – Los llamados al cierre del Congreso y la salida de la presidenta Dina Boluarte se extienden este viernes en Perú, donde las protestas abarcaron Lima, mientras que los bloqueos de ruta persisten en el sur andino, afectando la turística ciudad de Cusco y el tren a Machu Picchu.
Perú vive su décimo día consecutivo de manifestaciones, y amaneció con Arequipa, segunda ciudad del país y cuna de revoluciones, prácticamente bloqueada, sin comunicación terrestre con las vecinas regiones andinas de Cusco y Puno.
Las violentas protestas iniciadas hace un mes dejan hasta el momento 42 muertos, incluido un policía que fue quemado vivo por una turba, según la institución.
La jornada registró también nuevas marchas en Tacna, 1.220 km al sureste de Lima, limítrofe con Chile, país cerró temporalmente su paso el jueves \”debido a las manifestaciones en las cercanías del complejo fronterizo peruano de Santa Rosa\”, informaron las autoridades chilenas.
Gobernadores regionales y varios colegios profesionales del Perú se sumaron al pedido de renuncia de la presidenta Boluarte.
“¿Cuántos muertos más va a costar la permanencia de Dina Boluarte en la presidencia?”. Eso debemos preguntarnos todos los peruanos, de izquierda o derecha. Ningún cargo puede estar encima de la vida humana”, dijo a la prensa el gobernador de Puno, Richard Hancco.