Cartago.- Eduardo “Lechita” Valverde vive minuto a minuto la final del Verano 2013. Se siente bendecido por Dios al llegar a esta instancia con el Cartaginés y sueña con el título como premio por todo lo que ha hecho en su vida y por la labor de sus compañeros, cuerpo técnico, dirigencia y afición del club para llegar al objetivo.
BRETEADOR
Antes de llegar al fútbol, Valverde tuvo que pulsearla en otro tipo de trabajos.
“Recuerdo que empecé en la finca La Isabela, en Turrialba, tenía como 12 años y me habían dado un permiso especial para estar ahí, pues necesitaba el dinero para llevarlo a casa. Luego, cuando entrenaba en Turrialba, me tocaba ir a trabajar a una finca de helechos, flores.
Fui conserje en el Ministerio de Educación Pública y estudié en el INA para carpintero y albañil. Todo esto me ayudó a forjar una personalidad y posteriormente Dios me llevó a equipos de primera división como Santacruceña, Santos y ahora Cartaginés”, recordó Valverde.
Según “Lechita”, llegar a ser campeón sería lo máximo y se lo dedicaría a su mamá, hijo y familiares por el apoyo que le han dado. “Uno que toda una vida la ha pulseado en la calle ve la final como una experiencia única y si salgo campeón con el equipo sería como un premio de Dios”, acotó. Aun cuando no sabe si jugará mañana el primer partido, Valverde dice que siempre está listo para entrar a la cancha. “Yo me entrego en el campo, si me está yendo mal trato de que las ganas no falten, soy metedor y busco lo mejor para el equipo”, agregó.
Sobre la serie ante Herediano, “Lechita” indicó: “Estamos cerca de hacer historia, pero hay que jugar los partidos y ganarlos”.