La entrega de dádivas en el caso Diamante envuelve a funcionarios del municipio de Alajuela, quienes en las licitaciones en apariencia favorecieron a la empresa MECO S.A. para que realizara las obras que dicho cantón requiriera.
Así se desprende del informe 043-SADEF-CI-2020 del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), en el que se detalla el vínculo que tendrían Humberto Soto y José Luis Chacón Ugalde, alcalde e ingeniero de la Unidad Técnica de Gestión Vial Municipal, respectivamente, quienes al parecer mantuvieron contacto directo con Luis Fernando Gutiérrez Vargas, gerente de la planta de asfalto de MECO.
Entre lo especificado en el texto se hace mención a las diligencias que habría hecho Chacón para que la constructora ganara las licitaciones.
“Bajo un acuerdo previo con Gutiérrez Vargas accedió que este realizara una serie de trámites que no le correspondían, como lo fue propiamente el arreglo de carteles para proyectos de esa localidad y montos presupuestarios”, indica el informe.
En apariencia, tras el contacto, Gutiérrez habría pactado una reunión con el funcionario municipal, en la que supuestamente le entregaría un vehículo y un beneficio.
“Dentro de las comunicaciones se desprendió cómo estos se reunían para que Luis Fernando le diera lo que identificaban como ‘aquello’ utilizando lenguaje cifrado para no externar de qué se trababa realmente.
Así mismo Luis Fernando le manifestó que tenía todo listo para la entrega del carro Purdy Motor, lugar en el cual le habría conseguido un bono de $1.400 para que los utilizara conforme este quisiera”, añade.
Como parte de las explicaciones judiciales se sospecha que la entrega estaría pactada para julio de este año, sin embargo se presume que tras darse a conocer el caso Cochinilla la fecha se pospuso.
Asimismo el documento del OIJ indica que al parecer, debido a los contactos que ambos mantenían, Gutiérrez le habría dado órdenes al funcionario municipal y le habría indicado las formas en que se usarían los dineros.
Según detalla el informe, el alcalde Humberto Soto supuestamente tendría conocimiento de las acciones que el funcionario de su municipio y el gerente de MECO mantenían para ganar las licitaciones.
“En una conversación sostenida con Luis Fernando hablaron acerca de los montos de dinero que estaban introduciendo para obra pública, a lo que Luis Fernando le dijo a Humberto que ocupaba ‘envalentonar’ más a José”, añade.