Las varices son dilataciones de las venas del sistema venoso superficial, que además del efecto estético que producen, pueden producir síntomas como sensación de pesadez, dolor, hinchazón o calambres.
Existen diversas complicaciones con respecto a las varices, algunas son: coágulos sanguíneos, sangrado y úlceras.
Para prevenir la aparición de varices, es importante que las costumbres y estilo de vida no faciliten su aparición. El objetivo primordial pasa por mejorar el retorno venoso en las piernas, para ello se aconseja:
Se recomienda no permanecer de pie o sentada durante períodos de tiempo prolongados. En caso de que su actividad laboral se desarrolle en estas condiciones, se recomiendan pequeños paseos a lo largo del día o efectuar movimientos circulares con los pies.
Caminar es el ejercicio más beneficioso para la circulación venosa.
Deportes como la natación, la gimnasia, la danza, la bicicleta o el golf favorecen el retorno venoso.
Sin embargo, deportes como el tenis, el balonmano o el baloncesto se deben evitar puesto que provocan variaciones bruscas de presión en las venas.
Se recomienda una alimentación baja en calorías y rica en fibra, así como una correcta hidratación (1,5 litros del agua al día).
Además, se debe evitar el calor en las piernas (tomar el sol en las piernas, depilación con cera caliente, baños de agua caliente o saunas) puesto que favorece la dilatación venosa.
En este caso se recomiendan las duchas de agua fría en las piernas puesto que activan la función venosa y alivian la sensación de pesadez y dolor.
Las prendas demasiado ceñidas comprimen las venas y bloquean la circulación de retorno, por esta razón se recomienda que utilizar ropa cómoda.
Así como el uso de calzado amplio y confortable (no estrecho, ni puntiagudo), que sujete el pie y a la vez permita su correcta movilidad. No se recomiendan zapatos demasiado altos ni demasiado planos; un tacón de 2-3 cm se considera adecuado.
Se recomiendan la realización de masajes en las piernas desde los pies hasta las ingles, presionando ligeramente, puesto que aumentan la velocidad del retorno venoso.
Otro de los consejos es elevar las piernas tantas veces al día como sea posible. Puede colocar una almohada bajo sus pantorrillas con objeto de elevarlas unos 10-15 cm. Esta medida le permitirá reducir el éxtasis venoso mientras duerme.