Las fracciones de oposición mostraron molestia e indignación ante las declaraciones que en las últimas horas trascendieron del presidente Carlos Alvarado y el ministro de Hacienda, Rodrigo Chaves, sobre la situación financiera de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
El mandatario reconoció que en relación con la Caja “no hay plata” en referencia a la deuda que tiene el Estado con la emblemática institución de salud pública, que ronda los ¢2 billones.
Este jueves en la conferencia de prensa sobre el Covid-19 expresó: “Si hablamos de deudas o montos por ¢1,5 billones, ciertamente esos montos no son del alcance del gobierno ni del Estado”.
También el ministro Chaves expresó a la junta directiva de la institución “que no puede hacer nada para resolver el problema financiero de la Caja”.
Después en su página de Facebook el jerarca amplió su posición sobre el tema: “Mi respuesta a declaraciones recientes sobre la CCSS es que el país no debe dedicar montos desproporcionados a una sola institución, sino que hay que ser justos y balanceados con todas las familias, las empresas y las instituciones.
Hoy más que nunca el Ministerio de Hacienda está en la obligación de asegurar que los recursos limitados que tenemos lleguen a todos los sectores necesitados para no dejar a nadie atrás.
El Ministerio de Hacienda tiene el interés y la responsabilidad de apoyar el fortalecimiento de la CCSS. Sin embargo los montos que se han mencionado en torno a este tema están fuera de las posibilidades reales del país y del marco de responsabilidad macroeconómica”.
RECURSOS
Los legisladores entienden que el Estado no puede cancelar la deuda de la institución de una sola vez, pero condenan la posición del Poder Ejecutivo, donde de entrada se lavan las manos sobre la crisis financiera de la Caja, que se acrecienta ante la pandemia.
Román Macaya, presidente ejecutivo de la CCSS, dijo que el seguro de salud proyecta pérdidas de entre ¢190.000 millones y ¢303.000 millones. Además que la afectación económica a las reservas de la institución supera los ¢30.000 millones.
El frenteamplista José María Villalta no entiende cómo el gobierno quiere debilitar a la Caja en medio de una crisis sanitaria y además cómo el ministro de Hacienda falta a su palabra cuando en la Comisión de Hacendarios asumió el compromiso de reponer los recursos a la institución.
El frenteamplista dijo que no volvería a dar su voto a cualquier otro crédito que pida el gobierno hasta que no haya claridad sobre cómo se entregarán los recursos a la CCSS.
Igual posición manifestó la liberacionista Franggi Nicolás, quien aseguró que no votaría más empréstitos hasta que no haya una posición sólida del gobierno para proteger a la Caja.
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OTROS RECURSOS
El socialcristiano Erwen Masís indicó que el Estado debe pensar en la manera de producir más recursos y recordó que él propuso la extracción de oro y gas natural, la producción de cannabis o bien la generación distribuida.
Insistió en que el gobierno debe buscar la forma de que la Caja salga adelante, ya que es una institución que todos debemos cuidar al máximo.
Su compañera de fracción Shirley Díaz recordó que ella presentó un proyecto de ley (21.875) cuyo objetivo es que las instituciones destinen hasta un 10% de su presupuesto ordinario. También pretende que exista una contribución solidaria y voluntaria de la empresa privada, los funcionarios y colaboradores privados de mayor rango, y en general.
La junta directiva de la CCSS pidió una reunión con los jefes de bancada para mostrar las cifras de la institución y buscar una vía para obtener más recursos. Ese encuentro se fijó para el próximo lunes a las 4 p.m.