El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, tendrá que enfrentar un juicio oral por los delitos de agresión sexual y de coacciones, en el caso del beso forzado que le dio a la jugadora Jennifer Hermoso.
\”El juez de la Audiencia Nacional, Francisco de Jorge, ha acordado la apertura de juicio oral a Rubiales, en una fecha posterior aún por definir”, señaló un comunicado del tribunal.
La Fiscalía pide para Rubiales una pena de 2 años y medio de cárcel, por el delito de agresión sexual, por el beso en sí y por coacciones, es decir, por haber presionado a la deportista para que justificara y aprobara el beso que recibió contra su voluntad, según indica el escrito del Ministerio Fiscal.
La acusación también pidió dos años de libertad vigilada una vez cumpla la pena de cárcel, así como prohibición de comunicarse o acercarse a Hermoso durante cuatro años, e indemnizar a la jugadora con 50.000 euros ($54.000).
El juez De Jorge pidió a Rubiales que depositara una fianza de 65.000 euros en un \”plazo de 24 horas\” para hacer frente \”a las responsabilidades civiles a las que pudiera ser condenado\”.
EL CASO
El 20 de agosto, Rubiales besó en los labios al número 10 española, Jenni Hermoso, ante las cámaras de todo el mundo, pocos minutos después del triunfo de la Roja en Sídney durante la final de la Copa del Mundo femenina.
Su gesto provocó una ola de indignación en España y en el extranjero, y Rubiales acabó dimitiendo al mes siguiente.
Desde una reciente reforma del Código Penal español, un beso no consentido puede considerarse agresión sexual, una categoría penal que agrupa todos los tipos de violencia sexual.