Hibert Mora lleva seis años de vivir completamente del atletismo, pero en estos momentos de crisis económica, ante la pandemia del COVID-19, tuvo que sacar sus dotes de barbero y empezar a generar ingresos de una forma diferente, para redondearse un salario que le permita vivir con tranquilidad.
El corredor usualmente se mantiene del apoyo que le dan sus patrocinadores y luego se gana una platica más si queda en los primeros puestos de alguna competencia a las que usualmente va, una vez cada 22 días.
Sin embargo, vio cómo un patrocinador no pudo seguir respaldándolo en estos momentos debido a la situación que pasa el país y ahora con la suspensión de todo evento masivo tuvo que encontrar la forma de mantenerse estable y decidió lanzarse a cortar cabello, pues desde hace cinco meses se está preparando para ser barbero.
“Tengo mesecillos de estar estudiando barbería porque tengo aspiraciones a montarme un negocio cuando me retire del atletismo profesional, pero se me adelantó el asunto por eso del coronavirus, entonces tuve que tirarme a cortar al público antes de lo que tenía previsto”, externó Mora a DIARIO EXTRA.
El corredor siempre tuvo afinidad por este oficio, por eso desde tiempo atrás ya se había echado al agua con su papá, hermanos y amigos. Ahora, en vista de la necesidad, lo está haciendo con clientes a quienes atiende en la casa de su mamá en Granadilla de Curridabat.
“Ya tenía bastante confianza, no es lo mismo ya estar cortando pelo todo el día con diferentes clientes, pero me ha ido súper bien. Me hice ahí un rótulo junto con mi novia que me ayudó y lo empecé a publicar en mis redes sociales y las veces que he llegado se me ha llenado”, agregó.
Mora primero quiere que la gente lo conozca, por eso cobra entre ¢2 mil y ¢3 mil por corte, así se ha ido afilando y ahora quiere seguir de esa manera en esta nueva faceta con la clientela que está armando.
Hasta el momento, el reto más difícil que tuvo fue cortarle el pelo a un muchacho que llegó con la melena larga y debió hacerlo en capas, por lo que Mora admite que sudó la gota gorda.
“Sí, claro, porque yo todo lo que he estudiado son cortes a pura máquina y navaja, pero ya hacer un corte con pelo largo es otra cosa y le gustó bastante al muchacho y ya más bien un día de estos me puso un mensaje que quería que se lo volviera a cortar”, contó.
En su espacio siempre se esfuerza por que todo esté bien limpio para garantizar su seguridad y la de sus clientes.
“Todo trabajo que tenga contacto con otras personas es riesgoso, pero yo trato de cuidarme bastante, mi novia siempre me jala el mecate de que deje los zapatos afuera de la casa, de que cuando entre me bañe y todo, igual cuando estoy cortando trato de que todos los clientes se laven las manos, esterilizar las máquinas y también utilizo guantes”, apuntó.
El atleta tiene la proyección de ya tener montada su barbería en espacio de un año, quiere que sea un establecimiento bastante elegante, donde pueda dejar volar el talento que está desarrollando y brindar trabajo a algunos barberos más en esta zona. Hibert Mora ya se plantea que hará en su futuro cuando cuelgue las tenis del atletismo profesional, por ahora seguirá pulseándola para salir adelante ante esta pandemia que afecta a Costa Rica y al mundo.