Hoy, a nivel mundial, el Código de Barras cumple 40 años de haber aparecido en el mundo comercial como una herramienta logística de control. Ahora se busca es ir más allá de eso, se pretende incorporar más al consumidor, a fin de que éste haga una mejor compra.
En una visita efectuada por Guillermo Varela, director ejecutivo de GS1, fue entrevistado por la directora y gerente general de DIARIO EXTRA, Iary Gómez y por la subdirectora Marcela Villalobos sobre las transformaciones y utilidades de esta herramienta de control no solo para el ámbito empresarial o industrial, sino de la importancia del mismo para el consumidor final.
¿Qué es lo que se busca conmemorar con los 40 años del Código de Barras?
– Es una celebración a nivel mundial. Lo que se quiere es apalancar y recapitular lo hecho y analizar los retos como por ejemplo el uso de la tecnología y cómo impacta de manera indirecta sobre los consumidores.
¿Qué cambios se vislumbran de ahora en adelante?
– Son muy radicales y es que sobre cómo algo desde el punto de vista empresarial se involucra ahora en un factor preponderante que es el consumidor. Asimismo, cómo lograr que éste pueda tomar decisiones de compra y consumo de manera muy inteligente, utilizando tecnologías.
¿De qué está hablando?
-Básicamente lo que está ocurriendo a nivel mundial es que con la telefonía celular, con el uso de los smartphone, la gente lee los códigos de barras y tiene la información.
El punto está en que la misma sea confiable y tomar las decisiones al respecto.
¿Qué está sucediendo a nivel mundial?
– A partir del código de barras se ha dado una serie de proyectos, etapas y herramientas tecnológicas. Por ejemplo, en los productos de consumo nació rápidamente todo lo referente al control de inventarios a través de las cajas o unidades de distribución que benefició el acceso al manejo de esas listas.
Después vino el tema del empleo de información variable para que los grandes compradores y comercializadores pudieran administrar datos como número de lote y fechas de vencimiento. A partir de finales de los 80\’s y principios de los 90\’s que se comienza a manejar lo que hoy se conoce como los sistemas de trazabilidad, que permite controlar mayor información para garantizar la calidad de los bienes en la cadena de abastecimiento.
¿Cómo mejora la tecnología al código de barras?
– Lo que busca la tecnología es lograr la velocidad en los procesos. Por cuanto, actualmente, entre más crecen las empresas, así será la cantidad de procesos y de variables también, muchos.
¿Cuáles considera que son los grandes agentes de cambio alcanzados con el uso del código de barras?
-En el tema social, cuando se dio el atentado contra las Torres Gemelas y el cambio de legislación a nivel aduanero de Estados Unidos y de otros países, lo que provoca son legislaciones que empiezan a obligar, a ciertos sectores industriales y empresariales, a adoptar tecnologías y herramientas estándar que permitan manejar procesos seguros e información de calidad.
A esto hay que sumarle lo que pasa con las vacas locas o la gripe aviar (junto a los puntos anteriores) hay que aunar el cómo generar herramientas de software que permitan a las empresas que han adoptado código de barras y de comercio electrónico, entre otros, para desarrollar sistemas de trazabilidad confiable que le llegue al consumidor final.
¿Qué es el código de barras?
-Haciendo una buena analogía, el Código Barras es un llavín que permite acceso a la información y la llave es el lector óptico que despliega un rayo láser infrarrojo que choca contra el código, la barra oscura absorbe la luz y en ese segundo se decodifica la información contenida. Así, el número que está dentro de la memoria del computador, que tiene la base de datos del detallista, procede a desplegar la información con el nombre, precio y otras características del artículo.
¿Cuál ha sido la función del código de barras con la gente común y silvestre?
– Lo que ha hecho el código de barras es conectar al consumidor con la información.
¿Cuántos códigos de barra existen?
– En los lineales, comercialmente hay tres tipos: el que se usa para decodificar la unidad de consumo, la unidad de distribución y el tercero para unidades de distribución que, además de poner números, lo identifica. Se incluye otra información variable como el número de lote, la fecha de vencimiento y número de orden de compra, entre otros, con lo cual la empresa automatiza el proceso.
En cuanto a niveles, ¿cuántos códigos de barra son?
– Son tres niveles tradicionales del Código de Barras lineal. El primero se conoce como el GTIN (sus siglas son en inglés) para número global de información comercial. Existe el GTIN 14 que es para identificar exclusivamente los corrugados, es decir las unidades que se utilizan para transportar las de volúmenes de consumo. Y luego está la GS1 128 que es una tira en el que están varios códigos pegados donde, además del número del código de barras del producto de consumo, está la información variable diversa, siendo la más típica: número de lote, fecha de producción, de vencimiento, cantidad y número de la orden de compra asociada a ese producto.
Pero hay otro tipo de Códigos de Barra lineales más pequeños…
– Hay otras herramientas de símbolos que fueron creados como lo son los códigos de barras lineales de una dimensión, pero también nacen los de dos dimensiones que son los que parecen como tableritos de ajedrez, al que se le conoce como GS1 Datamatrix o GS1 QR.
Permiten, en símbolos muy pequeños, implementar la trazabilidad del producto y la comunicación con el consumidor final, al poder este, al utilizar su teléfono celular inteligente tipo Smartphone, poder interactuar con el fabricante del artículo y obtener mucho más información sobre el producto.
¿Cómo ha sido el proceso de incorporación de este mecanismo de control en el país?
– La penetración, en cuanto a lo que es el uso del código de barras en CR, es muy buena. Costa Rica tiene a nivel empresarial un mercado de pymes muy grande como de 40 mil y de esas la mitad son pulperías, supermercados, farmacias, ferreterías, bazares, entre otros. En consumo masivo, entre el 95% y el 98% de los productos se manejan hoy día mediante el código de barras.
Las grandes cadenas detallistas no compran nada a sus proveedores si no traen código de barras de origen.