El Consejo Nacional de Producción (CNP) reanudará los pagos a los arroceros y a los proveedores. Esto luego de que la Contraloría General de la República les aprobara un presupuesto extraordinario por ¢15.174 millones.
Adolfo Ramírez, presidente del CNP, dijo que los giros se darían entre este lunes y el miércoles. El aval se recibió el pasado viernes.
Se trata del segundo presupuesto extraordinario aprobado para la institución, que quizá sea la que está llevando la peor parte de la regla fiscal al tener ingresos, pero no poder gastarlos ante los límites dispuestos en la Ley 9.635.
“Con el aval del ente contralor, quedamos habilitados para reanudar el pago a más de 378 proveedores de diferentes líneas, como frutas, vegetales, productos cárnicos, pollo, huevo, abarrotes”, indicó Ramírez.
La idea es mantener el abastecimiento a centros educativos, Cen-Cinai y demás clientes que en su momento también se vieron perjudicados debido a la incapacidad de pago, pues, a pesar de contar con liquidez, no contaba con espacio presupuestario autorizado.
Ramírez acotó que la autorización de la Contraloría también permitirá pagar a las industrias arroceras con las que el CNP tiene acuerdos y ha adquirido producto de estos últimos meses.
Y es que, justamente, los productores de arroz tienen más de dos semanas de espera, tanto para recibir el pago, como para entregar la cosecha y eso hace difícil reinvertir el dinero en la siembra.
DINEROS PARA EL PAI
Un dato adicional es que la institución podrá ejecutar el dinero que tenía en reserva para el pago a proveedores del Programa de Abastecimiento Institucional (PAI).
“Este es un compromiso que tiene esta administración con los productores y de esta forma lo estamos cumpliendo. Los pagos inician este mismo lunes. Estamos resolviendo las situaciones, poco a poco, porque no todo se puede resolver de la noche al día, pero vamos con paso firme hacia adelante”, manifestó el ministro de Agricultura y Ganadería, Víctor Julio Carvajal Porras.
Como parte de las justificaciones que dio el CNP para que le aprobaran los recursos, se incluye que al 31 de octubre se había ejecutado en un 97% del presupuesto para producto terminado y que había saldos comprometidos. En ese momento, la institución calificó la situación como preocupante debido a que se tenía que cumplir con los pagos a los suplidores que abastecen el PAI.
La demanda de las instituciones del Estado está orientada a satisfacer las necesidades alimenticias de la población que le corresponde atender en sus cometidos institucionales y está garantizada en los presupuestos anuales. Esto debe ser abastecido por dicho programa.