El Consejo Nacional de Producción (CNP) invertirá ¢500 millones en un software para salir de los problemas de pagos que arrastra el Programa de Abastecimiento Institucional (PAI).
Los directivos de la entidad reconocen que la situación que hoy se vive con los productores es “caótica”, con atrasos de hasta seis meses en los pagos por “errores” burocráticos.
La institución todavía tiene la esperanza de que prospere el proyecto de ley que se presentó para salir de la regla fiscal, pero de momento se hace la valoración para ver cuánto costaría este equipo tecnológico.
Entre las justificaciones se indica que este sistema vendría a prevenir y evitar que se cometan esos errores porque se tiene mucho personal que tramita y hace muchas tareas que un sistema tecnológico podría llevar a cabo.
El gobierno pretende fortalecer a la institución, al igual que a la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) y el Programa PIMA/Cenada.
En este momento el eje principal de la institución es el PAI y pretende darle las herramientas para transformarlo, como una empresa de servicios, en el tanto la institución funcionaría como intermediaria.
Además se argumenta que el CNP requiere contar con una sistema logístico que permita en tiempo real conocer, controlar y consultar los diferentes procesos del PAI, en el que a su vez se integre la planificación de recursos empresariales.
Una de las opciones que se valoran es trasladar las oficinas del CNP a las instalaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) en La Sabana.
Al parecer el plan para construir una nueva sede quedó en nada y ahora también se baraja la posibilidad de que la institución se incluya en el proyecto Ciudad Gobierno, que albergará a la mayoría de las instituciones del Estado.
De este modo no solo se trasladaría el Servicio Nacional de Aguas Subterráneas, Riego y Avenamiento (Senara), sino también el CNP. El movimiento se haría el próximo año.
El criterio del MAG es que hay suficiente espacio para albergar a ambas instituciones relacionadas con el sector agropecuario. Eso implicaría generar ahorros en el pago de alquiler.