En Costa Rica, todos los años al menos 13.000 personas son diagnosticadas con algún tipo de cáncer, siendo el de pulmón, mama y próstata los que reportan porcentajes de fallecimiento más altos. De ese total, solo 7.000 pacientes ganan la batalla contra la enfermedad.
Sin embargo, un estudio de la Agencia Costarricense de Investigaciones Biomédicas, la Universidad de Costa Rica (UCR), la Agencia Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer y el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos determinó que la mortalidad por la mayoría de estos tumores en nuestro país es menor en las zonas rurales que en las urbanas.
Según el análisis que hacen los expertos, ese dato puede deberse a estilos de vida más tradicionales y saludables, en términos de alimentación o en consumo de ciertas sustancias como el alcohol o el tabaco.
“Esto es coherente con la distribución del consumo de tabaco en Costa Rica, pues se sabe que en las áreas rurales es menor. Además se sabe que el consumo de alcohol en el país también está asociado con una posición socioeconómica alta, más frecuente en zonas urbanas”, explicó Cristina Barboza, investigadora de la UCR.
SUPERVIVENCIA
RELATIVA MEJORA
Actualmente los indicadores de supervivencia relativa han mejorado hasta un 20%, cifra que contempla casos en todas las etapas de la enfermedad, incluida la metastásica.
Recientemente el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) reveló que en 2022 un total de 5.360 costarricenses murieron víctimas del cáncer y la tasa de mortalidad fue de 102,8 por cada 100.000 habitantes.
“En los hombres observamos que el de mayor incidencia o el de mayor importancia es el de próstata con un 15,8% de las defunciones y en las mujeres es el de mama con un 16,0%.
Otro cáncer frecuente entre los hombres es el de estómago con un 13,4% de las defunciones y en las mujeres el de colon con un 10,8%”, explicó Pilar Ramos, coordinadora del Área de Servicios de Información y Divulgación Estadística.
Así mismo, las cifras revelan que el grado de mortalidad aumenta dependiendo de la edad del paciente, pasando de 1,6 por cada 100.000 en personas de 0 a 14 años a 678,4 por cada 100.000 en adultos mayores de 65 años.
Ante los datos de mejora en la supervivencia, Marcela Campos, sobreviviente de cáncer y presidenta de la Fundación Mujeres en Rosa, declaró a DIARIO EXTRA que el principal mito que se debe derribar para vencer este padecimiento es que este no es sinónimo de muerte.
“El cáncer no es sinónimo de muerte, la sobrevida actualmente es muy alta. Por ejemplo, en mama es muy alta. Antes a la gente le decían cáncer y pensaba que se iba a morir, ahora no. La tecnología ha cambiado y ya se puede vencer”, manifestó.
LAS RURALES TIENEN EL SUYO
Las cifras revelan que quienes viven en zonas rurales reportan una menor mortalidad por cáncer de páncreas, pulmón, mama, próstata, riñón y vejiga, pero en el caso del de estómago, este fue el más frecuente en dichas áreas.