Una auditoría de la Contraloría General de la República (CGR) evidenció que el Consejo Nacional de Vialidad (Conavi) presenta una serie de demoras y debilidades en el mantenimiento de las rutas nacionales que no están asfaltadas, es decir aquellas que solo tienen lastre.
“De los contratos de intervención iniciados y finiquitados durante el periodo 2016-2019, se evidenció que los plazos programados se cumplieron en tan solo un 31% de los proyectos, lo cual deriva en una eficiencia baja”, menciona el informe.
Estos son algunos de los hallazgos de la Contraloría.
PLANIFICACIÓN
Uno de los principales aspectos que criticó el ente contralor son los errores en la planificación, lo cual hace que los proyectos terminen siendo más caros, debido a las demoras en las contrataciones.
Inclusive la auditoría aduce que hay proyectos donde el costo superó el 100% de lo presupuestado en un inicio, “que se relacionan con movimientos de tierra, compras de materiales granulares y maquinaria”.
“Se identificó la ausencia de mecanismos de control físicos y digitales, que incorpore al menos información geográfica, fotográfica, justificaciones topográficas u otras que la administración considere pertinente para asegurar, con un nivel de confiabilidad, el inventario de necesidades”, añade el informe.
Según la Contraloría, entre la evaluación del camino a intervenir, el proceso de contratación y el inicio de las obras puede transcurrir en promedio hasta un año, lo cual hace que las reparaciones estudiadas sean distintas al momento de ejecutar los planes.
Según el análisis, también hubo diferencias en los precios de algunos suministros que superaron hasta el 40% de más, comparando el 2019 con años anteriores.
EFICIENCIA
Otro de los aspectos que destaca la CGR es que los recursos económicos se concentran solo en 2 de las 9 regiones a nivel nacional que cuentan con caminos de lastre.
“No se identificaron elementos técnicos que respalden y validen las aplicaciones de nuevas técnicas o tecnologías cuyos costos son significativamente superiores a los convencionales, de forma que garantice los beneficios de su aplicación”, alega el ente contralor.
Entre 2016 y 2019 cinco zonas no tuvieron ninguna asignación de presupuestos, mientras que diez comunidades concentraron el 33% de los recursos totales.
La región Central y Chorotega componen cerca del 53% de los 3.100 kilómetros de calles de lastre que hay en el país.
FINIQUITOS
En el periodo que la CGR analizó existían 112 proyectos que aún no tenían un finiquito, de ellos 22 son de la región Central, 55 de la Chorotega, 10 en el Pacífico Central, 3 en la Zona Sur y 26 en la Zona Norte.
“No se cuenta con información de precios de mercado que sirvan de insumo para la Administración en su formulación y que a su vez contemplen una perspectiva amplia más allá de las contrataciones anteriores”, concluye el estudio.
INVERSIÓN A LA BAJA
La auditoría de la CGR encontró que la inversión en la mejora de este tipo de caminos bajó considerablemente durante el 2019.
Año …………………… Monto
2016 …………………… ¢4.116.795.441
2017 …………………… ¢7.377.043.551
2018 …………………… ¢8.221.290.012
2019 …………………… ¢3.797.124.250
Fuente: CGR