Ciudad del Vaticano, (EFE).- Un alto prelado italiano, Nunzio Scarano, fue detenido acusado de fraude y corrupción en el marco de una investigación sobre las supuestas irregularidades en la gestión del Instituto para las Obras de Religión (IOR), el llamado banco del Vaticano.
Además de Scarano, exresponsable del servicio de contabilidad de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (APSA), que gestiona el inmenso capital inmobiliario del Vaticano, arrestaron un exagente de los servicios secretos de Italia y un intermediario financiero.
Según fuentes judiciales, se trata del excarabinero Giovanni Maria Zito, agente de los servicios secretos internos italianos (AISI) destituido hace algunos meses de su cargo, y Giovanni Carenzio, intermediario financiero cuya actividad tiene sede en las islas Canarias (España).
Estas detenciones se producen tras la orden de arresto dictada por las autoridades judiciales de Roma ante la entrada ilegal en Italia de 20 millones de euros procedentes de Suiza, una operación que supuestamente el prelado pudo llevar a cabo de acuerdo con el exagente.
Los investigadores sospechan que Scarano, perteneciente a la Archidiócesis de Salerno (sur de Italia), le entregó 400.000 euros a Zito a cambio de que éste trajera de vuelta, desde Suiza hasta Italia, 20 millones de euros pertenecientes a una familia amiga a bordo de un avión privado y que habían sido confiados a Carenzio.
El portavoz vaticano, Federico Lombardi, recordó que a Scarano lo cesaron hace más de un mes y que la Santa Sede \”no ha recibido aún petición alguna sobre la cuestión por parte de las autoridades italianas, pero que confirma su disponibilidad a una plena colaboración\”.
El pasado miércoles, el Vaticano informó que el papa nombró una comisión, para que investigue todo lo que ocurre en el banco del Vaticano.