Una serie de allanamientos llevada a cabo por el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) con apoyo de los cuerpos de la Policía Municipal de San José y Goicoechea, así como de la Policía Administrativa, permitió desarticular una banda que se dedica al trasiego y venta de estupefacientes.
En total, las autoridades judiciales realizaron 9 allanamientos en Sagrada Familia, propiamente en el Bajo de La Puñalada, así como dos más en La Guácima de Alajuela y San Rafael de Heredia, en los cuales se detuvo a 10 personas sospechosas del delito de tráfico de drogas.
Se trata de 8 hombre y 2 mujeres, todos de nacionalidad costarricense.
Los hombres responden a los apellidos Acuña Mena, de 38 años; Bejarano Delgado, de 26 años; Chan Cubillo, de 47 años; Calderón Castillo, de 38 años; Munguía Gutiérrez, de 43 años; Gutiérrez Mena, de 58 años; Mena Chacón, de 47 años; y Marenco Sandoval, de 23 años
Mientras que las féminas detenidas responden a los apellidos Sandoval Rodríguez, de 53 años, y Munguía Gutiérrez, de 39 años.
ANTECEDENTES GOTA A GOTA
Dicha investigación arrancó en el año 2022, mediante informaciones confidenciales recibidas que señalaban como se desarrollaba la ilícita actividad por parte de la banda que operaba especialmente en Sagrada Familia.
Luego de determinar que efectivamente dicha organización tenía su sede en la barriada sureña y se dedicaban a la venta, distribución y transporte de droga como marihuana, cocaína y ketamina, se decidió arrancar con la operación este martes.
Según el director del OIJ, Randall Zúñiga, los 10 sospechosos tienen amplios antecedentes judiciales, pues ya han sido pasados en otras ocasiones por el mismo cargo: tenencia y distribución de drogas.
“Estas personas han sido pasadas por varios delitos anteriormente, como narcotráfico, agresión e incluso prestamos gota a gota”.
Para Zúñiga, la importancia que reviste esta operación es suprema, pues son 11 allanamientos en total que dejan de manifiesto, según el director judicial, que la policía realmente trabaja en pro de la justicia.
MODUS OPERANDI
Zúñiga dejó entrever que el modus operandi de la organización era a través de la venta de drogas.
“Ellos lo que hacían era vender droga en esta zona y zonas aledañas, ya tenían una hegemonía o dirección del territorio que se ve acá y, por ello, para nosotros es muy importante desarticular este grupo criminal para dar un poco de tranquilidad y respiro a las poblaciones de esta zona”, sostuvo Zúñiga.
Por ahora los detenidos, la droga e incluso dinero en efectivo, así como las armas de fuego decomisadas y al menos 15 celulares quedaron a las órdenes del Ministerio Público como evidencia.