Ponerse violento en el cumplimiento de sus labores le costó al tráfico de apellido Umaña y de 36 años, que agentes de la Sección Especializada de Tránsito del Organismo de Investigación Judicial lo sacara esposado de la delegación de Santa Ana.
El policía fue capturado por los delitos de por abuso de autoridad y daños, pues según el OIJ, pateó el vehículo de un conductor y lo madreó tras hacerlo detenerse.
Según los judiciales, el hombre que denunció es un joven de 24 años, quien alega que el 1º de enero pasado salió de un taller donde tenía su vehículo marca Toyota en reparación en Santa Ana y partir de ese momento vivió minutos de angustia por el matonismo del oficial.
En el camino el tráfico le hizo señas para que parara porque no andaba marchamo y el conductor decidió meterse en una propiedad privada para que el oficial no pudiera abordarlo.
En apariencia este sería el detonante para que Umaña se pusiera chiva y sin pensar en las consecuencias se metió en la propiedad privada para increpar al tipo que quiso evadirlo.
Presuntamente tras gritarle improperios al ofendido quien estaba en su carro con su novia y una menor de dos años, comenzó a patearle el carro de forma violenta.
Esta reprochable acción causó que la bebita se asustara y se atacó a llorar al ver al furioso policía volando patadas. Según el OIJ, el policía se asustó e intentó salir de inmediato del lugar, pero el dueño de la propiedad quiso impedirlo para que le diera una explicación del por qué se había metido a su terreno.
Al parecer el violento agente se subió a la patrulla en que andaba y sin importar el señor estaba al frente aceleró y le tiró el carro para que se quitara y así poder escapar.
El propietario del lugar no tuvo más opción que quitarse para no poner en riesgo su vida.
Por los dos delitos Umaña enfrentó ayer a la Fiscalía para un interrogatorio y posteriormente al Juzgado Penal de San José para conocer las medidas que le iban a interponer.