Un hombre de apellidos Segura Gómez, de 28 años, que permanecía en fuga por ser sospechoso del asesinato de dos primos de apellido Barboza, en Heredia, fue detenido por policías de Nicaragua por presentar una condición migratoria irregular.
Este sujeto, que sería uno de los propietarios del bar donde ocurrieron los hechos, al parecer huyó ilegalmente al país vecino, por lo tanto, el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) solicitó apoyo nicaragüense.
“Al momento de su detención, se encontraba en compañía de una mujer identificada con el apellido Potosme, que mantenía una orden de captura vigente por el delito de robo agravado. Ante esta situación, se coordinaron acciones para la entrega de ambos a las autoridades costarricenses en el sector de Peñas Blancas”, dijo el Ministerio de Seguridad.
Días después de los homicidios, Diario Extra dio a conocer que Segura tenía antecedentes por lesiones y robo agravado.
En 2016, por el primer delito fue condenado a tres años y cuatro meses de prisión, pero la sanción fue sustituida por el monitoreo electrónico, mientras que todavía está pendiente el juicio por el segundo caso.
“La causa N.24-000203-1094-PE es por robo agravado, acusada por la Fiscalía de Heredia, y espera audiencia preliminar para el 25 de marzo de 2026”, ampliaron las autoridades.
Abogados defensores
De momento solo un hombre de apellido Palacios se encuentra en prisión preventiva por lo que este medio conversó con su defensor, Rafael Rodríguez, quien aseguró que al acusado no le encontraron heridas que evidenciaran la participación en una pelea.
“Dentro de las investigaciones judiciales destaca que se dio una riña de la cual los ofendidos resultaron con lesiones que les provocaron la muerte. Yo le puedo indicar que mi cliente fue remitido a Medicatura Forense para determinar si existió algún tipo de lesión compatible con heridas defensivas o de riña y los resultados fueron negativos”, enfatizó.
Añadió: “Solicitaremos al Ministerio Público que haga algunas indagaciones, ya que ciertamente él se encontraba en el lugar, pero no fue partícipe de los hechos. Incluso han señalado que estuvo durante todo el tiempo que permanecieron los cuerpos en el bar, pero esto no es cierto”.
De los sospechosos de los homicidios únicamente Palacios recibió prisión preventiva, por lo que este medio le consultó a Rodríguez la explicación que brindó Fiscalía.
“Le impusieron la medida porque su arraigo laboral era endeble, pues se decía que era el vigilante del sitio, algo que no es cierto, sino que fue por una situación circunstancial: temporalmente, cuando lo necesitaban, usaban el servicio de él”, finalizó el abogado.