La restricción vehicular sanitaria que se aplica por la emergencia nacional del COVID-19 ha permitido a las autoridades dar con una serie de irregularidades y sacar de las calles a decenas de conductores ante incumplimientos.
Un ejemplo de ello fue el operativo realizado en la Ciudadela La Carpio, ubicada en la Uruca, el lunes 13 de abril.
Los oficiales de la Fuerza Pública detuvieron un microbús con el objetivo de verificar que todo estuviera en orden, pero al abordar al conductor y solicitarle la licencia de conducir notaron algo extraño.
Los uniformados que realizaban el control en carretera vieron la licencia de conducir, la cual no les parecía real, ante ello coordinaron con la Policía de Tránsito.
En dicha instancia les informaron que el nombre registrado en el documento no aparecía en la base de datos como conductor.
Según el reporte del Ministerio de Seguridad Pública (MSP), se trata de un hombre de 30 años identificado como de apellido Esquivel y quien conducía un microbús con una licencia falsa del tipo B3.
De inmediato los uniformados coordinaron con los asesores legales del Ministerio de Seguridad, quienes les indicaron que detuvieran al sujeto y, posteriormente, lo remitieran al Ministerio Público con un informe por el presunto delito de uso de documento falso.
Este joven se suma a los 188 conductores reportados por la Dirección de Apoyo Legal Policial del Ministerio de Seguridad Pública que remitieron ante la Fiscalía por diversos presuntos delitos identificados en los operativos diarios por la restricción vehicular sanitaria.