Como medida para prevenir el cáncer de cérvix y otras afecciones derivadas del virus del papiloma humano (VPH), la seguridad social inició hace varios años una campaña masiva de vacunación contra la enfermedad, que le cuesta a la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) cerca de $1 millón al año.
No obstante, además del costo de las dosis, otro reto que enfrenta la institución es un descenso en la cobertura después de la pandemia.
Así mismo, la vacuna consta de dos dosis para tener la protección completa, sin embargo, no todas las niñas obtienen el refuerzo porque la cobertura desciende del 78,61% en primeras dosis al 55,54% en segundas.
Es decir, cerca del 23% de las niñas no obtuvo su esquema de protección contra el VPH completo durante 2023.
Así mismo, según datos revelados a DIARIO EXTRA por el Sistema de Información Gestión de Suministros (Siges) de la CCSS, la demanda promedio mensual de la vacuna contra el VPH es de 6.784 unidades.
Anualmente se compran 81.414 unidades, cuyo precio promedio, según las compras efectuadas en 2023, es de $11,21 por frasco.
Por lo tanto, la inversión anual asciende a $912.351,57; es decir, cerca de ¢450 millones.
¿CUÁNDO HARÁ EFECTO LA VACUNA?
Estas dosis se aplican a niñas de 10 años y lo que se pretende es la prevención del cáncer de cérvix, que normalmente empieza a verse en mujeres mayores de 25-30 años.
El Ministerio de Salud detalló que en ese plazo esperan ver resultados positivos en cuanto a la disminución de los casos de este tipo de cáncer.
“En general, los estudios han demostrado que la vacunación contra el VPH puede tener un impacto positivo en la reducción de la prevalencia de infecciones por VPH y la incidencia de enfermedades relacionadas en la población vacunada.
Sin embargo, es importante tener en cuenta que la vacunación es una medida a largo plazo y puede tomar varios años antes de que se observen resultados significativos a nivel de la población meta, que son las niñas de 10 años en adelante, y que se comenzó a vacunar en junio del2019 a esta población”, informó la Caja.
Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) revelan que el 80% de los ticos son propensos a padecer papiloma, ya que es una enfermedad de transmisión bastante común.
Este es un padecimiento que en la mayoría de los casos el sistema inmunitario lo elimina en un aproximado de dos años, sin causar complicaciones a la persona portadora.
No obstante, al ser un virus con una gran variedad de cepas existen algunas que son de mayor riesgo que otras, por eso en un pequeño porcentaje de personas sobrevive durante más años, impactando con más efectos negativos a las mujeres.
Lo anterior es así porque el virus contribuye al proceso de que algunas células del cuello del útero se conviertan en células cancerosas, siendo el papiloma el principal causante del cáncer de cuello uterino.
Costa Rica se caracteriza por confiar en la prevención como una herramienta para combatir el avance de las enfermedades, por eso en 2019 se introdujo la vacuna contra el VPH en niñas de 10 años dentro del esquema de vacunación obligatorio.