El Ministerio de Seguridad Pública registra un total de 15.440 denuncias de violencia doméstica desde mayo de 2023, lo que representa en promedio 45 casos diarios a nivel nacional.
La mayor cantidad de atenciones de las unidades policiales se dan en la Gran Área Metropolitana (GAM) y el 80% del trabajo de las autoridades se relaciona con casos de violencia intrafamiliar, según Mario Zamora, jerarca de la institución.
Los datos se dieron a conocer en conferencia de prensa en la que diferentes entidades explicaron las medidas conjuntas que realizan para la atención de estos casos y cómo abordan las situaciones de los menores involucrados en femicidios.
El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) ha recibido 3.900 denuncias por conflictos familiares durante 2024, mientras que el año anterior la cifra llegó a 105.000. Sobre femicidios, hay un total de 89 menores “sobrevivientes” durante los tres últimos años, conforme detalló Kennly Garza, presidenta de la organización.
VECINOS TESTIGOS
Ante estas estadísticas de denuncias, las autoridades hicieron el llamado a los vecinos que son testigos de casos de violencia intrafamiliar para que reporten, pues muchas veces escuchan o ven situaciones de agresiones en los hogares cercanos y prefieren callar.
“Tenemos que fomentar la cultura de la denuncia, pero también a nivel de las comunidades la cultura de ser testigos judiciales de los hechos denunciados, ahí es donde solidarizamos la actuación policial en estos hechos de violencia, siendo parte de un proceso judicial que requiere ser esclarecido y aclarado ante un juez, ahí es donde es importante esa solidaridad de los vecinos con estos acontecimientos”, dijo Zamora.
El principal inconveniente que tienen las autoridades cuando la agresión se da en un recinto privado es que se requiere la anuencia de la víctima, primero para reportar y después para denunciar.
Por este motivo, de acuerdo con Zamora, en estos casos la mayoría de las actuaciones policiales incluyen oficiales mujeres para crear empatía con los afectados.
DENUNCIAR
El Instituto Nacional de las Mujeres (Inamu) sostiene que salir de este círculo de violencia no es sencillo, pero es necesario que las víctimas se acerquen a las autoridades y pidan apoyo.
Asimismo, la institución instó a las mujeres que se encuentran en situaciones de violencia intrafamiliar a pedir los kits de emergencia, los cuales tienen geolocalizadores y botones de pánico que cuando son activados oficiales de Fuerza Pública acuden al llamado. “Hemos tenido experiencias que en menos de cinco minutos la Policía está ahí y hemos logrado salvar vidas”, dijo Adilia Caravaca, presidenta del Inamu.
Entre 2018 y 2022 se solicitaron 246.584 medidas de protección, lo que equivale a un promedio de 135 por día, la mayor cantidad fue requerida por féminas contra hombres.
Los presuntos agresores son parejas sentimentales, cónyuges, familiares, entre otros.
AGRESORES
De acuerdo con las estadísticas del año 2022 del Observatorio de Género del Poder Judicial, en cuanto a los rangos de edades de los agresores sobresalen los hombres de los 27 a los 44 años como los que mayormente cometen violencia doméstica y San José figura como la provincia donde más se registran estos hechos. Asimismo, los solteros suelen atacar más.
Otro dato que tiene relevancia es que las víctimas en su mayoría son mujeres de los 18 a los 53 años. Solo en San José se registraron 7.875 solicitudes de medidas de protección por parte de féminas en 2022.
¿POR QUÉ LOS HOMBRES REACCIONAN VIOLENTAMENTE?
Según el sociólogo Francisco Barahona, hay una parte de la sociedad costarricense que está muy arraigada a la cultura machista e incluso muchas veces esa clase de conductas vienen reforzadas por parte de las madres.
“Esta cultura no solo se induce a través de los hombres con sus hijos, sino con frecuencia también de las mamás con sus hijos, porque las mamás tienen también valores machistas. La suma en valores machistas por el papel tradicional de la mujer en sus hogares, entonces es un círculo cultural bastante negativo”, explicó.
Para el experto resultan nocivos estos casos, tanto para las mujeres como para los hombres, pues se ven completamente limitados a no vivir una cultura de igualdad y de respeto.
De igual forma, subraya que en algunas ocasiones las actitudes de pertenencia suelen aparecer cuando estas personas creen tener motivos, ya sean reales o no, de que alguien es de su posesión. “Actúan como si fueran dueños de esas personas y el enfrentamiento va creciendo y si no se hace algo para separarlos o para proteger a la parte más débil de la pareja, que generalmente es la mujer, terminan en casos de femicidio”, aseveró.
CÍRCULO DE VIOLENCIA
Barahona también comenta que en el círculo de violencia las relaciones comienzan bien, pero poco a poco aumenta el nivel de agresividad.
“Por el machismo, el hombre cree que físicamente y por término general es el más fuerte, aunque sabemos que eso no es así hoy en día. Entonces el hombre, sintiéndose como propietario de esa persona, comienza a demostrarle una falsa autoridad, un falso sesgo de violencia y de pertenencia”, afirmó.
El Periódico del Pueblo también habló con María Ester Flores, psicóloga, quien afirmó que las personas violentas podrían actuar de forma explosiva. “Las personas violentas son inseguras y cuando confirman esas dudas e inseguridades hay un riesgo de que cometan algún acto de violencia, hasta el punto de llegar a matar”, recalcó.
URGE EDUCACIÓN
Un tema importante para Barahona es la educación y resalta que el Estado debe hacer mayor inversión en este rubro, así como colocan más policías en las calles.
“El Estado es el que tiene que meterse en eso a fondo, así como están pidiendo más policías, pues hay que pedir más maestros, formarlos más urgentemente y en un plazo de por lo menos 10 o 15 años para que esto mejore, pero pareciera que los gobernantes no tienen olfato, ni tienen nariz para actuar con prevención, simplemente actúan apagando incendios y con eso lo que se hace es aumentar el calibre de la explosión de la bomba”, puntualizó.
El Inamu estableció un convenio con el Instituto Costarricense de Masculinidad, Pareja y Sexualidad (Instituto WEM) para trabajar con hombres con conductas agresoras.
La opción está abierta para todos los que deseen formarse en masculinidades igualitarias y en la prevención contra la violencia de género.