Entre el juicio político a Donald Trump, las negociaciones para aprobar el ambicioso programa de Joe Biden y el difícil reparto del poder con los republicanos en el Senado, Chuck Schumer afronta el mayor desafío de su carrera al tomar las riendas de la mayoría demócrata en la Cámara alta.
A los 70 años, el senador de Brooklyn, a quien le gusta recordar sus orígenes humildes, prometió trabajar con los republicanos \\\”cuando y donde sea posible\\\”.
Schumer fue recibido con afables palabras por su gran rival, el líder republicano en el Senado Mitch McConnell, que lo saludó como \\\”el primer congresista judío en liderar una de las dos cámaras. Un momento histórico\\\”.
Pero las cortesías deberían ser de corta duración.
La vicepresidenta Kamala Harris tendrá el poder de decidir en caso de empate en las votaciones en el Senado, donde las bancas están repartidas entre 50 demócratas y 50 republicanos.
Y mientras el nuevo presidente demócrata quiere que el Senado acelere el ritmo de las confirmaciones de los miembros de su gabinete y pide al Congreso que adopte su plan de estímulo económico de 1,9 billones de dólares lo antes posible, Schumer y McConnell todavía están negociando la gobernanza del Senado.
Ambos líderes deben decidir en particular cómo se pueden aprobar los proyectos de ley y las nominaciones en los comités, también divididos en partes iguales entre republicanos y demócratas.
En cuanto al juicio político a Trump, que se abrirá el 8 de febrero, Schumer deberá convencer a 17 republicanos si quiere que el expresidente sea condenado. Un objetivo casi imposible.
También tendrá que mantener unida a su bancada, que va desde el izquierdista Bernie Sanders hasta el muy conservador Joe Manchin, electo en el estado republicano de Virginia Occidental.
– \\\”Difícil\\\” –
\\\”Será un período difícil\\\”, dijo la senadora Susan Collins, una republicana moderada.
\\\”Con un Senado dividido en partes iguales, el líder de la mayoría deberá esforzarse por construir alianzas, pero no es conocido por eso\\\”, dijo el viernes.
\\\”Tiene poco margen de maniobra\\\”, admitió el senador republicano Lindsey Graham, aliado de Trump.
Es muy poco probable que los republicanos apoyen el enorme paquete de estímulo a la economía de Biden, afirmó, \\\”pero se podrá llegar a un paquete de ayuda más pequeño\\\”.
En tanto, es poco probable que se apruebe el plan presidencial de regularizar a millones de inmigrantes indocumentados mientras se reforma el sistema migratorio, advirtió.
Sí podría haber un acuerdo limitado para los \\\”dreamers\\\”, los aproximadamente 700.000 inmigrantes que llegaron a Estados Unidos siendo niños.
A partir de 2022, advirtió, los demócratas deberán defender su muy estrecha mayoría en el Senado, pero también en la Cámara.
¿Podría Schumer verse tentado a vengarse de los republicanos tras las provocaciones de la era Trump?
\\\”No, no\\\”, insistió a la AFP el senador demócrata Robert Menéndez. \\\”Debemos aprovechar esta oportunidad\\\” para hacer avanzar el programa demócrata\\\”, señaló.