BERLÍN Y LYON. (EFE) – El Bayern Múnich de Pep Guardiola le ganó caminando pero sin aplastarlo a un Barcelona experimental y compuesto casi exclusivamente por canteranos que se defendieron ante un conjunto bávaro dominador y que pese a su gran superioridad física dejó el marcador en 2-0.
Lionel Messi era el único titular de los azulgranas y ni siquiera jugó los 90 minutos, mientras que Guardiola demostró que tiene dónde elegir y repartió tiempo para sus mejores hombres, consciente de que no era un amistoso cualquiera.
El exblaugrana exhibió ansias de renovación y movió a los suyos a posiciones poco habituales, con el capitán Philipp Lahm, en el minuto 14, y Mario Mandzukic, en el 87\’, como autores de los goles. Los suplentes del Barça plantaron cara en un estadio del que meses atrás, en la semifinal de la Champions, se hundieron 4-0 con sus titulares.
El partido de Múnich abrió la pretemporada de los azulgrana, ayer dirigidos por Jordi Roura, quien seguirá el sábado en Oslo frente al Valerenga.
Mientras tanto en Francia el proyecto de Ancelotti recibió ayer su primer aviso al sufrir el Real Madrid contra el Olympique de Lyon (2-2), en un partido amistoso que reflejó la falta de ritmo del conjunto blanco frente a un rival mucho más rodado.
Morata y Casemiro arreglaron en los minutos finales un partido que se les había puesto muy cuesta arriba y parecía sentenciado con los goles de Grenier y Lisandro.
La próxima parada del Real Madrid será la ciudad sueca de Gotemburgo para medirse el sábado al París Saint Germain.