La banda del hijo de la exministra de Salud Guiselle Amador se sentará en el banquillo de los acusados para un juicio en el Tribunal Penal de Cartago, el cual se efectuará del 4 al 12 de enero próximo.
Este hombre fue detenido junto con cinco personas en varios allanamientos realizados por la Policía de Control de Drogas (PCD) en febrero de 2019.
A los imputados del debate los identificaron con los apellidos Redondo Ramos (mujer), Bermúdez Molina, Bastos Herrera, Pizarro Cartín y Owen Strauss.
Las detenciones se ejecutaron durante una serie de operativos hechos en una bodega en La Unión, además de cinco casas ubicadas en Cartago, Heredia y San José, entre ellas la vivienda de la exministra.
En los allanamientos, los agentes de la PCD decomisaron unos $3.100 en efectivo, celulares, documentos de interés financiero, así como tarjetas de débito y crédito que, aparentemente, se utilizarían para gestiones ilícitas.
Desde abril de 2018 las autoridades indagan a estas personas, luego de recibir información confidencial en la PCD donde indicaban que, en apariencia, los imputados se dedicaban a alquilar casas para producir marihuana en ambientes controlados y así extraer el aceite y la cera de las plantas.
La banda, al parecer, empacaba los derivados en ampollas o cartuchos, para luego venderlos a precios que rondaban entre ¢60 mil y ¢100 mil.
HIJO DE EXMINISTRA VINCULADO
Uno de los detenidos en los allanamientos era un hombre de apellidos Cortés Amador, hijo de la exministra de Salud, quien, al parecer, era uno de los líderes del clan dedicado al cultivo de la marihuana gourmet.
Aparentemente, Cortés Amador alquilaba un apartamento atrás de la casa de su mamá donde tenían cuatro armas de fuego de diferentes calibres.
Según revelaron las pesquisas seguidas por la PCD, este grupo se dedicaba a la venta de marihuana procesada en presentaciones como wax (cera), aceite y creepy, que comercializaban a distribuidores o consumidores en La Unión de Cartago, Santa Ana en San José y Heredia.
Cortés Amador, conocido como “Cori”, de 42 años, ya contaba con antecedentes por tenencia de drogas y era uno de los superiores jerárquicos, encargado de administrar, coordinar acciones, girar órdenes y aportar o suministrar dineros a la organización.
El segundo narcolíder es de apellidos Pizarro Cartín, conocido como “Deivid”, “Homy”, “Dave”, “Saya” o “Pixi”, de 33 años, encargado de cultivar, asistir y procesar la marihuana para obtener el producto final. Tenía antecedentes por tenencia de droga.
También proveía de equipo, suministros, insumos (abonos-vitaminas) y se encargaba de dar mantenimiento a las viviendas en las que se ubicaban dichos laboratorios.
FUNCIONES CLARAS
El resto de miembros de la agrupación mantenía funciones claras. Redondo Ramos, mujer, cubanoestadounidense de 60 años y conocida como “Rox”, “Roxi”, “Olga Ligia Redondo”, sin antecedentes, se encargaba del cuido, mantenimiento y cultivo de marihuana en ambientes controlados en una de las viviendas investigadas (laboratorio ubicado en Heredia).
Además, realizaba entregas de droga (producto obtenido de los cultivos de marihuana) a otros miembros de la organización y a terceros referidos por Pizarro Cartín.
Bermúdez Molina, costarricense, 38 años, sin antecedentes, era el encargado del cuido, mantenimiento y cultivo de marihuana en una de las viviendas investigadas (laboratorio ubicado en Heredia). También tenía a su cargo el almacenamiento del producto terminado y su distribución a terceros y compradores.
Bastos Herrera, costarricense, de 38 años, con antecedentes por robo agravado, tenía su vivienda ubicada en La Unión de Cartago donde manejaba un laboratorio de cultivo de plantas de marihuana (machos y hembras) para su clonación y posterior venta a terceros o compradores. Se ocupaba de la recolección de la droga directamente de los laboratorios y realizar entregas de dichos productos ilícitos a terceros clientes.
Owen Strauss, estadounidense, de 70 años, conocido como “Jeff” o “El Gringo”, sin antecedentes, aportaba dineros provenientes de su capital para el desarrollo y mantenimiento de los laboratorios, participaba activamente en el cultivo, cuido y mantenimiento de las plantas y de los equipos, así como en el procesamiento de la droga.