Lo que dificulta investigar estafas con tarjetas
Si un estafador consigue los datos de sus tarjetas de débito o crédito y realiza compras en líneas con ellas o traslados de fondos desde su cuenta bancaria es prácticamente imposible saber desde qué dispositivo lo hizo.
Esto es así porque los bancos no cuentan con herramientas para el rastreo de las direcciones IP (siglas en inglés de protocolo de internet), según explicó José Ledezma, gerente de Operación del Banco de Costa Rica (BCR), a DIARIO EXTRA.
Por ello, una vez que se lleva a cabo la estafa y se utiliza la tarjeta es prácticamente imposible conocer quién es el estafador, al menos para los bancos, de tal manera que se aconseja tomar todas las prevenciones necesarias para no verse en esa situación.
De acuerdo con Ledezma, esto se debe a que las entidades bancarias no pueden tener un registro de datos con la totalidad de los números de identificación de cada uno de los dispositivos inscritos en el país y, menos aún, los no inscritos de manera oficial.
“Es prácticamente imposible tener la identificación de todos los celulares de los costarricenses o de los clientes en general. No es viable, no es una práctica común de la industria”, manifestó.
Por ahora los bancos cuentan únicamente con el registro de identificación de los comercios, por lo que pueden acceder a la información de la compra en línea, dentro de la que se encuentra el día, la hora y el monto de la transacción.
“Esa trazabilidad del comercio nos ayuda a apalancar para las diferentes revisiones que hacemos posterior a las compras”, agregó.
¿POR QUÉ CUESTA TANTO?
Abel Brenes, ingeniero del Centro de Informática de la Universidad de Costa Rica (UCR), explicó que encontrar una dirección IP, o más bien utilizar la información asociada a esta, es algo complicado.
El experto afirma que para obtener ese código numérico tendría que judicializarse el caso; es decir, presentar una denuncia formal ante el Ministerio Público, entidad que podría consultar la dirección IP a un proveedor del servicio de internet.
Pero ahí no acaban los problemas, ya que es posible cambiar el número de registro del dispositivo a través de una red privada virtual (VPN, por sus siglas en inglés).
Existen aplicaciones web de VPN en las tiendas de Apple, Android y Google, por lo que es fácil acceder a ellas.
Asimismo, según Brenes, está la red oscura de internet, por medio de la cual los estafadores acceden a datos de las víctimas de estafas y también pueden venderlos.
TIPS PARA NO SER ESTAFADO
Tal como lo enfatiza el funcionario del BCR, lo mejor es prevenir las estafas antes que buscar a los culpables, por lo que enumera una serie de recomendaciones para que no utilicen sus tarjetas de débito o crédito.
Nunca ingresar a enlaces recibidos a través de mensajes de correo electrónico, de texto o redes sociales porque podrían dirigirlo a un sitio web fraudulento.
Siempre digite la dirección web de la entidad financiera en la barra del buscador.
Utilice una computadora protegida con un antivirus actualizado.
No utilice redes inalámbricas públicas para realizar transacciones financieras.
Nunca brinde información sobre su tarjeta vía telefónica ni por correo electrónico: número de tarjeta, fecha de vencimiento o código de seguridad.
¿QUÉ ES UNA DIRECCIÓN IP?
Son los números de identificación de las computadoras, teléfonos celulares y otros dispositivos con conexión a internet o a una red local. Contienen información de la ubicación y brindan a los dispositivos acceso de comunicación.