Isidro Jiménez, conductor de una vagoneta amarilla, perdió el conocimiento por un bajonazo de azúcar y quedó incrustado en el portón eléctrico de una casa en barrio María Auxiliadora de Aserrí.
El afectado, quien aparentemente estaba aún asustado y afortunadamente solo se llevó un gran susto, tomó fuerzas y conversó con DIARIO EXTRA. El chofer del vehículo pesado explicó que iba bien sobre la carretera e incluso pasó un muerto.
Después de esto no se dio cuenta de nada más. “Ni me di cuenta que había chocado”, contó.
Trascendió que vecinos de la localidad y los dueños de la casa llamaron a las autoridades a través del 9-1-1, para que brindaran colaboración.
AYUDA
Al sitio del suceso acudieron bomberos, oficiales de Fuerza Pública y de Tránsito.
Bomberos realizaron la revisión del vehículo, pero el afectado se encontraba afuera de la vagoneta, por ello se retiraron casi de inmediato.
Esteban Castillo Bonilla, oficial de tránsito, se apersonó al lugar e indicó que a don Isidro no tuvieron que realizarle alcoholemia, porque no había indicios que le indicaran que se encontraba bajo los efectos de esta sustancia.
Afortunadamente, ninguna persona resultó lesionada, sin embargo, el efectivo expresó que la vivienda sí sufrió grandes daños, por lo que le realizó una boleta a ambos afectados (los dueños de la propiedad y a Jiménez,) para que pudieran arreglarse en el juzgado.
Posterior al incidente una grúa llegó a llevarse la vagoneta y don Isidro regresó con su familia.