La Comisión de Seguridad y Narcotráfico de la Asamblea Legislativa le dio visto bueno a la creación de un centro de capacitación exclusivo para el Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
De forma unánime, los legisladores dictaminaron afirmativamente el expediente 21.643 que permitiría que el OIJ, mediante sus órganos de apoyo (Oficina de Planes y Operaciones, Secretaría General y la Administración del mismo OIJ) tengan una Unidad de Capacitación y Formación Curricular como ocurre con otros órganos auxiliares de justicia, como el Ministerio Público y Defensa Pública.
Además de la capacitación, dicho centro prepararía a otros entes policiales a nivel nacional e internacional, administraría los campos de disparo de la institución, planificaría programas educativos para el OIJ y suscribiría acuerdos en materia judicial. Del mismo modo, supervisaría los programas de acondicionamiento físico y hábitos saludables para el buen desempeño en la función policial, con la intervención de un equipo interdisciplinario.
Finalmente, convalidaría cursos y se encargaría de los traslados internos y logística de los instructores internacionales que lleguen al país en gestiones oficiales de interés para la policía judicial, entre otras funciones.
EXTERNOS
El mismo texto de ley señala que el Poder Judicial podrá brindar cursos y capacitaciones a entes externos a la institución.
No obstante, dichos entrenamientos deberán ser cancelados y, precisamente, el Poder Judicial fijará los costos para cada uno de los cursos de capacitación, formación y especialización a los que aspiren los interesados.
En el caso de funcionarios del OIJ que reciban cursos actualización, deberán prestar servicios ininterrumpidos a dicha institución al menos por un año.
Además, los funcionarios que reciban y aprueben el curso básico como requisito de ingreso a la Policía Judicial deberán prestar servicio en forma ininterrumpida en el Organismo por un período mínimo de tres años después de aprobado, de lo contrario deberán cancelar el 100% del costo total del curso.
A partir del dictamen afirmativo, el texto pasará a manos de los 57 diputados.
En caso de ser aprobado en dos debates, irá a manos de Casa Presidencial para convertirse en ley de la República.