Distintas empresas autobuseras han tenido millonarias ganancias, incluso con números superiores a los que tenían previo a la pandemia del Covid-19.
Sin embargo, no cambian unidades que ya cumplieron 15 años de vida útil.
Así lo denunció la diputada del Frente Amplio (FA) Sofía Guillén.
El argumento de los autobuseros para no renovar su flotilla es que no tienen recursos, que se vieron afectados por la pandemia y además y los bancos no les están prestando dinero.
Sin embargo, la legisladora refutó dicha aseveración señalando que están “ganando de más”.
Uno de los ejemplos dados por Guillén fue el de la empresa de buses de Los Guido de Desamparados.
“Resulta que la empresa de Autotransporte Los Guido S.A. tiene 7 unidades que ya pasaron los 15 años, pero siguen circulando. Yo digo: la deben estar pasando muy mal, ¡pobrecitos, no puede cambiar las unidades! Pues, antes de la pandemia, esa empresa reportaba ingresos por ¢177 millones ¡Okey! Eso cae durante la pandemia, va al suelo y luego empieza a subir y para el 1° de diciembre del 2021, esta empresa había llegado a los ¢212 millones. Más que lo que tenía antes de la pandemia. El último reporte que aparece en la página de la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) es que, al 1° de setiembre del 2022, esta empresa reporta ingresos de ¢180 millones, que todavía es un monto superior al monto de ingresos de febrero del 2020, en el que no había pandemia”, detalló.
“Esta empresa ya no sólo recuperó sus ingresos, los superó, pero aun así tiene siete unidades circulando que superan los quince años (…) No hay excusa para que Autotransporte Los Guido no tenga la oportunidad de cambiar flotilla”, agregó.
Cabe recordar que, dentro del esquema tarifario de Aresep, se destina un 8% para depreciación.
Cuando un pasajero se sube a un autobús y paga su pasaje, en la tarifa ya está incluido un rubro para que esa unidad se pueda cambiar.
MÁS EJEMPLOS
Otro ejemplo dado a conocer por Guillén fue el de las Empresas de Buses de Guadalupe.
“Resulta que la empresa Guadalupe ha tenido una tendencia al alza de sus ingresos y el 1° de marzo 2020, 16 días antes del decreto de pandemia, reportaba ¢331 millones por ingresos. En este momento, está reportando ingresos por ¢368 millones, ya recuperó y ya sobrepasó lo que tenía antes y resulta que la empresa de Guadalupe tiene 10 unidades que ya pasaron los 15 años y que está circulando todavía. ¡Ningún pobrecitos! Ya recuperaron sus ingresos y los usuarios tienen diez, doce, trece, catorce años de estar pagando para cambio de flotilla”, dijo Guillén.
Caso similar con los buses de Pavas. Según la legisladora, a marzo de 2020 tenía ingresos reportados por ¢256 millones y para, setiembre del año pasado, reportó a Aresep un monto de ¢361 millones.
“Ya sobrepasó la situación de la pandemia en el caso de Pavas, ya tiene un monto muy cercano a lo que tenía antes e incluso superior a lo que tenía a inicios de marzo. No tiene excusas para no tener recursos de cambio de flotilla, insisto, porque el cambio flotilla ya lo financiaron los pasajeros pagando tarifas durante años, porque en esa tarifa está incluida la depreciación para el cambio. Autotransportes Pavas tiene 12 unidades con más de 15 años circulando (…) A mí no me vengan a decir que hay que alcahuetearles a Autotransportes Pavas o Autotransporte Los Guido. Ya recuperaron sus ingresos y tienen unidades que circulan con más de 15 años. ¡Ningún pobrecitos!¡Pobrecita la gente de esas zonas que tiene que hacer uso del servicio de transporte público en mal estado que lucra porque cobran las tarifas, la depreciación para financiar el cambio flotilla, pero que cuando llega la hora del cambio flotilla no le da la gana cambiar de flotilla!”, concluyó Guillén.
La iniciativa, bajo expediente 22.530, pretende modificar el artículo 46 bis de la Ley 7.600 para que buses, cuya vida útil haya vencido puedan circular 2 años más.
El texto quedó en la Comisión de Asuntos Económicos de la Asamblea Legislativa con más de 120 mociones presentadas por el Frente Amplio (FA) y se volverá a discutir hasta enero del 2023, cuando los diputados vuelven de receso.
Entretanto, los sectores autobuseros anunciaron un “paro técnico” a partir del primero de enero del 2023, ya que 290 unidades deberán salir de circulación por cumplir el plazo de ley. Entre las rutas afectadas están Hatillo, Guadalupe, Escazú, San Pedro, Heredia y zonas fueras de la Gran Área Metropolitana (GAM).