Algo tan insignificante y común en el fútbol como es entrar duro a disputar el balón en una jugada y por circunstancias de la acción cometer una falta le costó la vida al quinceañero Aldaus Tanasy Brown Monge, pues un jugador del equipo rival lo asesinó por eso.
El jovencito, vecino de Barrio Quinto, Limón, a quien en la comunidad conocen como un “chavalillo” muy deportista, sano y centrado en sus cosas, vio truncados sus sueños por otro joven colérico que no soportó que le quitaran la pelota con falta en el desarrollo de una mejenga de barrio.
DIARIO EXTRA conversó con la familia de Brown, ayer en el Hospital Dr. Tony Facio de Limón, donde lloraba su partida tras recibir un balazo en la ingle.
Uno de los parientes comentó lo ocurrido y lamentaron que algo tan sano como el deporte se convierta en el origen de un homicidio que sin duda alguna sigue dañando la imagen del cantón central de Limón.
“La semana pasada estaban jugando bola en una plaza cerca de la casa, siempre iban a la Barrio Quinto, pero ese día no sé por qué caminaron hasta otra. Me contó que en una jugada accidental golpeó a otro muchacho que iba contra él en el partido y cuando se levantó lo amenazó de muerte.
Aldaus no le hizo caso y siguió jugando, de hecho no creyó que el otro muchacho se tomara las cosas tan personales para cometer un tontera como la que hizo”, narró la familiar del muchachito.
LLEGÓ A BUSCARLO
Casi una semana después Brown ya había olvidado el incidente, pero ayer en la mañana, cuando caminaba cerca de su casa, se encontró con su rival, el mismo que lo amenazó de muerte.
Algo extrañado por encontrárselo en Barrio Quinto volvió a verlo y eso bastó para que el homicida sacara un arma de fuego y le soltara un plomazo en la ingle.
Una bala fue suficiente, el asesino huyó y dejó a su víctima tirada en el suelo pidiendo ayuda, llamado a su madre, quien es una reconocida chancera de Limoncito.
Un vecino que salió al escuchar el balazo llegó a auxiliarlo y en cuestión de segundos lo subieron a un vehículo particular para llevarlo al hospital.
En el centro médico los doctores lo recibieron y al ver que la bala había tocado una arteria actuaron con rapidez, pero el menor ya había perdido mucha sangre y eso lo llevó a la muerte en pocos minutos.
Sus familiares esperaban noticias positivas en la entrada de urgencias del centro médico, pero desgraciadamente uno de los doctores salió a darles el pésame, pues Aldaus, aquel joven deportista sin problemas, ya había partido al otro mundo.
MUCHA MOVILIZACIÓN POLICIAL
Tras el homicidio, decenas de oficiales de Fuerza Pública se movilizaron al lugar y sectores aledaños para hacer un rastreo con el fin de hallar al sospechoso.
Fuentes policiales indicaron que supuestamente el agresor también es un menor de edad y sería de un vecindario cercano a donde ocurrió el suceso.
El jefe policial Randall Picado aseguró que realizaron un arduo trabajo de rastreo en la zona, pero no tuvieron resultado respecto al caso, ahora serán los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) quienes se encarguen de cazar al homicida.
Los propios judiciales fueron a la escena para recoger evidencia de lo que ocurrió y así tener pistas más concretas de cómo dar con el asesino.