En una acción conjunta entre la Dirección de Inteligencia y Seguridad (DIS), la Unidad Especial de Intervención (UEI) del Ministerio de la Presidencia y el Organismo de Investigación Judicial (OIJ), se logró el decomiso de una tonelada de cocaína y varios fusiles de asalto, así como la detención de personas que se encontraban en una vivienda del sector de Quebrada Ganado en el cantón de Garabito, Puntarenas.
Según explicó el director del OIJ, Walter Espinoza, era “un grupo criminal que se dedicaba a trasegar de manera muy estructurada con clorhidrato de cocaína desde Costa Rica hacia terceros países, particularmente hacia México, donde tenía relaciones y vínculos que le permitía colocar la droga que trasegaban”.
Al parecer, la droga la recibía la organización criminal de otros grupos que traían la misma a las aguas del Pacífico costarricense, luego la llevaban a la casa de Quebrada Ganado que era usada para vacacionar, los integrantes del grupo se hacían pasar por turistas para así evitar ser detectados por las autoridades policiales.
Dentro de la vivienda se encontraron 1.101 kilogramos de clorhidrato de cocaína en paquetes de un kilo, además 9 fusiles de asalto, entre ellos AK-47, Colt y Galil, lo que hace presumir que era una zona de almacenamiento que resguardaban fuertemente ante cualquier acción policial o de grupos rivales.
Asimismo, hay dos vehículos todo terreno y un cuadraciclo que usaban para trasladar la ilícita mercadería desde la costa hasta la vivienda en el sector de Garabito.
Los detenidos son 5 costarricenses, dos mujeres de apellidos López y Varisco, así como tres hombres de apellidados López, Cortés y Chávez, todos de las zonas de Grecia y Cañas y serán pasados al Ministerio Público por el tráfico de drogas.