De forma definitiva la Asamblea Legislativa aprobó el proyecto de ley que sanciona los préstamos gota a gota.
El proyecto plantea sanciones de ocho a quince años de prisión a personas ligadas al crimen organizado que presten dinero con créditos abusivos y utilizando formas de cobro extorsivas, no obstante, se contemplan más sanciones en el texto de ley.
Quién amenace o intimide de forma personal, mande a terceros a hacerlo o incluso use cualquier otro medio (mensajes, WhatsApp, llamadas, correos, entre otros) con el fin de realizar un pago tendrá penas que van de cuatro a ocho años de prisión.
La pena subirá de cinco a diez años cuando la amenaza o intimidación se dirija a una persona menor de edad, adulta mayor o con alguna situación o condición de vulnerabilidad.
La misma pena aplicaría si el hecho fuese cometido por dos o más personas que agredan física o psicológicamente a la víctima o, en su defecto, si el delito se comete con armas o median daños a la propiedad.
“Muchas personas han sido lesionadas y viven temerosas de sufrir daños. Han tenido que recurrir a este tipo de préstamos por calamidad, pero esta ley tipifica diferentes tipos de extorsión (…). Estamos poniendo nuestro granito de arena para combatir la ola criminal que vive el país”, dijo Gilbert Jiménez, diputado del Partido Liberación Nacional.
“(…). Este proyecto pasó por la mesa de trabajo integrada por los tres presidentes de los Supremos Poderes y especialistas. Las políticas públicas en esta materia le corresponden al Poder Ejecutivo y ahora pedimos que den los presupuestos necesarios para dar una verdadera lucha. No solo son regalos de los Estados Unidos, sino que debemos poner de nuestra parte para combatir la criminalidad”, secundó Gloria Navas, presidenta de la Comisión de Seguridad y Narcotráfico.
De acuerdo con datos judiciales, en el primer semestre de 2023 el total de extorsiones denunciadas fue de 874, de ese número, 320 estuvieron ligadas a préstamos gota a gota.
A partir de ahora, el texto pasará a manos del Poder Ejecutivo, en caso de aprobarse en un segundo debate pasará a Casa Presidencial para convertirse en ley de la República.