Un grupo de revoltosos con voladera de piedras, palos y hasta objetos punzocortantes despidieron de esa forma a oficiales de la Fuerza Pública y a la Unidad de Intervención Policial del Ministerio de Seguridad Pública de Bellavista en Chacarita de Puntarenas, tras desalojar a 55 familias de una finca.
Las autoridades policiales tenían la orden firmada por su jerarca de sacar a las personas que ingresaron a la propiedad privada sin ningún permiso e instalaron sus ranchos desde hace varios meses.
Cumpliendo con la orden, los oficiales comunicaron de forma pacífica a los involucrados que debían salir del sitio porque iban a limpiar el terreno y así lo hicieron las más de 200 personas que al fin de cuentas se quedaron sin techo.
Todo transcurrió con normalidad, las familias sacaron sus cositas a como podían y al final vieron cómo la propiedad que invadieron era tomada por su dueño.
POLICÍAS HERIDOS
Sin embargo, eso le estorbó más a un grupo de vándalos que a los propios desahuciados, pues tomaron una actitud muy violenta cuando los policías iban saliendo del sitio y empezaron a tirar piedras.
“En el desalojo no hubo ningún problema, la gente entendió y colaboró, pero en los alrededores hay algunas comunidades en riesgo social y varios muchachos se aprovecharon de esta situación para meterse después del desalojo y fuimos objeto de un ataque. Nos defendimos para contrarrestar el altercado y detuvimos a dos de los que causaron problemas”, dijo Rigoberto Rodríguez, director regional de Puntarenas.
Los dos muchachos fueron trasladados hasta los Tribunales de Flagrancia por los disturbios y además por agresión a los oficiales, pues lesionaron a varios de ellos.
“En el enfrentamiento algunos compañeros fueron golpeados, pero nada de gravedad, algunos impactos de los objetos que lanzaron. De igual forma fueron pasados a valoración para descartar alguna lesión grave”, explicó el jefe policial. Para poner orden en el lugar, los antimotines (además de la fuerza) utilizaron gases lacrimógenos para que los revoltosos se fueran y así quitar el bloqueo con llamas que hicieron en la carretera.