Comentario
Me llegó por mi correo una copia de la nota que una empresa cobradora de créditos enviaba a un deudor moroso. Por supuesto, notas de esta especie son fórmulas clisés o machotes que circulan por cientos, pues la función de algunas empresas es cobrar, primero ofreciendo una zanahoria de ventajas, pero con el azote detrás de ellas.
Primero se comunica que procederá el cobro judicial, con embargo de casa, carros, cuentas bancarias, salarios y otros bienes. Pero, al mismo tiempo, ofrecen ventajas de rebajas de un 5% a un 50% de las deudas.
Estos \”regalos\” son posibles solo por una razón: se establece una cuenta con un atraso de ocho años o más, término en los que posiblemente la deuda principal esté prescrita, pero eso no lo sabe el deudor de a pie.
Pero también en la cuenta van los intereses por esos años, que de acuerdo con la ley prescriben o se extinguen cada año. También se suman los honorarios de un juicio inexistente. Como el deudor no conoce esta letra menuda le pueden cobrar un millón de colones, y debido a que la deuda se ha inflado con sumas extintas, el deudor termina hasta agradecido por el rebajo que le hicieron.
Estos son trucos que la gente desconoce, por lo que es recomendable que ante la posibilidad de aprovechar estas ofertas tan llamativas se hagan asesorar por un abogado. Sus honorarios saldrán del ahorro que el profesional le logre a su cliente mediante las defensas legales mencionadas.