En momentos que el gobierno anunció con bombos y platillos que apuesta a la reactivación de la economía mediante varias obras por concesión de proyectos que se mencionaron en el pasado, uno de ellos espera que el Consejo Nacional de Concesiones (CNC) de él sí para sumarse a dicha posibilidad. Se trata de la Megaterminal de Transbordo de Moín (MTA), impulsada por el consorcio Amega.
En diciembre anterior el consorcio de inversionistas Americas Gateway Development Corporation (Amega) en una reunión con el CNC detalló que está listo para reiniciar la fase de estudios finales de factibilidad del proyecto, pero tras cuatro meses de la cita no se les da el banderazo de salida para un proyecto que, de concretarse, se traduciría en una inversión privada de $1.000 millones y generaría empleo en la provincia de Limón.
En la actualidad la MTA se encuentra en la fase de proposición ante el CNC y según indicó, cuenta con $25 millones a fin de terminar los estudios requeridos en dicha fase.
Limón ha sido una de las provincias más afectadas por el desempleo ante el cierre de empresas que han sido generadoras de trabajo y cuya situación se ha agravado por la reducción de la Junta de Administración Portuaria y de Desarrollo Económico de la Vertiente de Limón (Japdeva), al tiempo que es una de las provincias donde se dificulta concretar las iniciativas laborales.
REACTIVAR EL PROYECTO
José Dengo Garrón, vicepresidente de Operaciones de Amega para Costa Rica, comentó que están listos para iniciar dicha fase, pero que para ello deben contar con el aval del Gobierno de la República.
“Es un tema de reactivar el proyecto, que de momento ha cumplido en todo y tiene todo en orden, pero que por diferentes motivos no se había podido avanzar y algunas de las cosas de la estructura administrativa del proyecto necesitan reactivarse para concluir con los estudios.
El gobierno, además de emitirnos esa orden de inicio, tiene que girar órdenes para volver a activar el fideicomiso, volver a contratar un gerente de proyecto para que esté trabajando en darle seguimiento a este proyecto en concesión, entre otras cuestiones de carácter interno”, afirmó Dengo.
La MTA comenzó a gestarse en 2007, por lo que tiene 13 años de ser de conocimiento de varias administraciones de gobierno, sin que hasta el momento se concrete.
En este sentido Dengo explicó que la iniciativa “iría mucho en la línea de proyectos de reactivación económica que anunció el gobierno y en este caso una concesión por iniciativa privada que no implica gasto público, entonces el gobierno no debe preocuparse por dónde conseguir el financiamiento, que le aprueben un préstamo y este tipo de cosas, sino que al igual que las carreteras Virilla-Río Frío y San José-Cartago, que son iniciativas privadas, el proponente, en este caso Amega, es el encargado de conseguir el dinero”.
Recalcó que desde 2007 se buscó que este proyecto generara fuentes de trabajo en Limón, situación que a lo largo de los años empeora.
“En este sentido cada vez se hace más urgente el proyecto. Estamos listos y a la espera, con la ilusión de convertir esto en una realidad finalmente”, añadió Dengo.
Amega desde 2007 ha invertido aproximadamente $40 millones en estudios, gastos administrativos y costo financiero de mantener el proyecto funcionando, pero los gobiernos no dan el banderazo de salida.