París, Francia, AFP. – Después de la eliminación en semifinales de la Liga de Campeones a manos del Borussia Dortmund, un equipo \’a priori\’ asequible, el PSG de Luis Enrique se lame las heridas, pero puede mirar al futuro con optimismo por lo logrado este curso, a pesar de la delicada transición pos-Kylian Mbappé.
– Falta de experiencia, intensidad y agresividad
El PSG, con un plantel joven, no pudo dar un paso más en la máxima competición europea, de la que se despide con la habitual sensación de decepción. De nuevo faltó un punto de intensidad, de calidad, de presión agresiva y de fluidez en el pase en las inmediaciones del área.
Los parisinos sólo ofrecieron su mejor juego en los últimos 30 minutos del conjunto de la eliminatoria ante el conjunto alemán. Muy poco para librar este nivel de la competición y clasificarse a la final.
Con una media de edad de 24 años y 157 días, los jugadores del PSG quizá adolecieron también de experiencia y pecaron de excesiva timidez: \”Yo no diría eso porque cuando uno es joven juega despreocupado y eso es también una fuerza\”, reaccionó Warren Zaïre-Emery, de 18 años.
Lo cierto es que el PSG parece un paso por detrás de los grandes de Europa como el Real Madrid o el Manchester City, que no suelen fallar en los momentos clave.
– Luis Enrique, \”responsable\” de sus decisiones
\”Soy el único responsable de la derrota (…) Volvería a tomar las mismas decisiones\”, proclamó Luis Enrique.
El técnico español se mantuvo fiel a sus ideas al alinear a un equipo joven y buscar un juego de pases sin prisas por llegar al área rival, ubicando a algunos jugadores en posiciones no habituales. Resultado: poca creatividad, fluidez y velocidad.
Pero también se mantuvo fiel a la costumbre de no repetir un once tipo. Ante el Dortmund en el Parque de los Príncipes varió el tridente de ataque respecto a la ida en Alemania, poniendo de inicio al portugués Gonçalo Ramos en punta, y escorando a la izquierda a Mbappé.
– Logros en su primera temporada
Al frente de un equipo renovado, el antiguo seleccionador de España puede presumir de haber implantado su sello.
El asturiano también ha instaurado un espíritu más basado en el conjunto por encima de las individualidades y un ambiente más sano en el vestuario que el que se vivía la temporada pasada con las estrellas Messi, Neymar y Mbappé.
Desde su llegada el pasado verano, Luis Enrique ha insistido en el juego de posesión, privilegiando la polivalencia, la competitividad a partir de las rotaciones, en las que incluyó incluso a Mbappé.
El PSG confía en cerrar esta primera temporada de la era Luis Enrique con el doblete nacional Ligue 1 – Copa de Francia, si derrota en la final de esta última al Lyon el 25 de mayo.
– Kylian Mbappé: ¿y ahora qué?
En su último partido de Champions en el Parque de los Príncipes, Mbappé decepcionó y puso un triste final a su sueño de lograr la gloria en París.
Poco inspirado, sin impacto en el juego e impreciso ante el arco, aunque mejor en la faceta de pasador, el delantero asumió su parte de culpa: \”Soy el chico que debe marcar los goles y ser decisivo. Cuando eso ocurre recibo todos los focos, cuando no funciona hay que asumir también toda la sombra\”.
Ni en Dortmund, ni en París dio la impresión de poder llevar a su equipo al título europeo. A pesar de sus 8 goles en 12 partidos en esta Champions, el \’7\’ no se ha mostrado del todo conectado en los últimos meses, desde que informase en febrero a los dirigentes del PSG de su decisión de no seguir en el club.
Luego de esta nueva desilusión en Champions con el equipo al que llegó en 2017, el capitán de la selección francesa podría anunciar en breve plazo su salida.
Quizá lo haga el domingo en el marco del partido ante el Toulouse en la que será su última aparición en el Parque de los Príncipes con los colores del PSG. Después llegará el momento de conocer su próximo destino, con el Real Madrid como mejor situado para hacerse con sus servicios.