Pese a que la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) ha enfatizado en la necesidad de reforzar la atención de primer nivel, la institución no cumple con la meta establecida.
Ya que dispone de 189 Equipos Básicos de Atención Integral en Salud (Ebáis), menos de los que se debería para cumplir la meta de atender a no más de 4.000 pacientes por centro.
Dado a esto, las estadísticas señalan que la mayoría de los Ebáis atienden a 4.584 personas, dicho déficit provocaría una saturación de los servicios de salud y una disminución en el número de consultas generales.
“Al no haber un servicio de salud eficiente disponible, la gente podría estar optando por no buscar asistencia médica o saturar los servicios de emergencias de los hospitales”, detalló Natalia Morales, investigadora del Programa Estado de la Nación.
Esta problemática se está dando a pesar de la reiterada necesidad que ha hecho Marta Eugenia Esquivel, presidenta ejecutiva de la Caja, sobre la apertura y equipamiento de los Ebáis.
Tesis que incluso utilizó de ejemplo cuando fue cuestionada en Cartago sobre el futuro del nuevo Hospital Max Peralta.
“No estamos siendo responsables al construir monstruosidades de hospitales que nos van a generar un costo altísimo y eso tampoco se vale. Cada colón lo invirtió un costarricense y tenemos que dar cuentas.
Queremos gente sana, no llenar hospitales. Ese es un error estratégico en la Caja y las poblaciones, que creen que un superhospital es la solución para la salud. Lo más importante es el primer nivel de atención, que más que pedirme hospitales, me pidan primer nivel”, externó.
Además de la mala distribución de pacientes, otra flaqueza encontrada en el Estado de la Nación sobre las áreas de salud fue la distribución desigual de los recursos, dependiendo de la zona en la que estaba ubicada.
Esta asignación de recursos por área no parece estar asociada al perfil poblacional.