Más de 60 agentes de la sección de Estupefacientes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en cooperación con la sección de Capturas, fiscales y jueces realizaron una barrida policial en Alemanias Unidas, Purral de Goicoechea.
Una de las casas que supuestamente servía de soda fue allanada y se decomisaron tres armas de fuego calibre 9 mm, 38 Special y calibre 22 con sus respectivos proyectiles y cargadores, además de ¢2 millones en efectivo, más de 335 gramos de marihuana comprimida, 75 gramos de piedras de crack y una pantalla plana.
Más de 60 agentes de la sección de Estupefacientes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en cooperación con la sección de Capturas, fiscales y jueces realizaron una barrida policial en Alemanias Unidas, Purral de Goicoechea.
Una de las casas que supuestamente servía de soda fue allanada y se decomisaron tres armas de fuego calibre 9 mm, 38 Special y calibre 22 con sus respectivos proyectiles y cargadores, además de ¢2 millones en efectivo, más de 335 gramos de marihuana comprimida, 75 gramos de piedras de crack y una pantalla plana.
En un segundo inmueble que tenía una comunicación secreta con la supuesta soda por la parte trasera los judiciales hallaron 120 piedras de crack, ¢70 mil en efectivo, un arma de fuego calibre 38 y detuvieron a un sujeto que al parecer era el recetador.
En la tercera y cuarta viviendas la policía solo logró la captura de un hombre que al momento de ver el contingente policial trató de escapar, pero la rápida acción policial solo le permitió cruzar la acera.
Al momento de llegar los judiciales tres hombres empezaban a reparar y llenar las máquinas electrónicas, posteriormente fueron puestos en libertad, no sin antes descartar que tuvieran pendientes con la ley.
El último punto visitado por el OIJ fue una casa a 50 metros de donde se ejecutaron los allanamientos y se encontraba una mujer que se presume es la líder de la narcofamilia, quien sin poner resistencia fue detenida.
En total se allanaron cinco viviendas después de una compra de 12 piedras de crack, donde las autoridades presumen tienen el negocio montado desde hace un año y al parecer acarrean la droga desde Limón.
Durante la barrida policial un curioso se acercó a ver qué estaba sucediendo y cuando los agentes del OIJ le pidieron la cédula para consultarlo resulta que tenía una orden de captura por el delito de hurto, inmediatamente fue pasado al Ministerio Público.
Las autoridades hacen un llamado a la ciudadanía para que denuncie la venta y distribución de drogas en los barrios, por lo que si usted conoce de este ilícito negocio no dude en comunicarse de manera confidencial al 800-800-645 del OIJ.