El presidente Rodrigo Chaves achacó que la problemática de corrupción vivida en el país se debe a la formulación de leyes y la ejecución de estas, pues, según su criterio, incidentes como Aldesa suceden por culpa de la legalidad, así como quienes administran la jurisprudencia y permiten que estos eventos sigan pasando.
Este caso se remonta a 2019, cuando el juzgado concursal denegó la posibilidad de reestructuración de la empresa de ese nombre, que tuvo un problema de liquidez por lo que fue declarada en quiebra y los inversionistas se quedaron sin recibir los fondos que habían colocado por décadas en la compañía.
“¿Diamante no fue corrupción? ¿Y Cochinilla? ¿Aldesa no fue un robo de al menos $250 millones? ¡Y todo el mundo queda impune! Pero el que se roba tres doritos, ¡pum, para adentro! Soltaron al carajo que vendía fentanilo, es que las leyes no están para eso aquí en Costa Rica”, declaró Chaves.
Según sostuvo el mandatario ante la pregunta de Diario Extra, la Asamblea Legislativa y el Poder Judicial llevan la batuta para que el territorio nacional alcance apenas una puntuación de 58 en el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC), lo cual ubica a Costa Rica en el último quintil entre los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
De acuerdo con los resultados de la IPC, Costa Rica se halla en la casilla 42 de 180 naciones.
Figura como la número 10 entre las naciones de América y con un puntaje de 58, lo cual se considera como una “democracia con limitaciones”.
“¿Por qué estamos con limitaciones para controlar la corrupción? Tal vez nos ha hecho falta más legislación, más institucionalidad, más recursos y más trabajo conjunto”, externó Juany Guzmán, presidenta de la Asociación Costa Rica Íntegra. Entre los aspectos evaluados, se registró una mejora con respecto a los riesgos económicos, políticos, sociales, ambientales, tributarios y de seguridad.
Además de un buen Índice de transformación hacia democracia y economía de mercado, relacionado a la deuda soberana, moneda, sectores bancario y clima de negocios.
En donde se flaqueó más fue en el Índice de Grado y tipos de Democracia, así como en la temática de Estado de Derecho y Gobernanza, junto con los avances hacia una mayor competitividad.