Ayer se inició en los Tribunales de Puntarenas el debate contra cuatro costarricenses sospechosos de formar parte de una supuesta red narcotraficante, descubierta hace cuatro años, que utilizaba tiburones para llenarlos de cocaína y enviarlos a México.
Ayer se inició en los Tribunales de Puntarenas el debate contra cuatro costarricenses sospechosos de formar parte de una supuesta red narcotraficante, descubierta hace cuatro años, que utilizaba tiburones para llenarlos de cocaína y enviarlos a México.
Entre los imputados figuran un hombre de apellido Ceciliano y su esposa apellidada Segura, quienes de acuerdo con las autoridades lideraban el narcogrupo.
Rafael Gairaud, abogado de Ceciliano, afirmó que demostrarán la inocencia de su representado.
“Damos inicio al juicio que se le acusa a Ceciliano, mi defendido, por el delito de narcotráfico, donde se le vincula supuestamente por introducir droga en vástagos de tiburones, los cuales se decomisaron en muelle de Caldera.
Lo que pasa es que Ceciliano vende los tiburones a mexicanos y son ellos, los mexicanos, los que le introdujeron la droga. Este proceso lleva ya cuatro años, y en el debate lo que vamos a demostrar es que Ceciliano es inocente y no es parte de esta red de narcotráfico”.
Agregó que no hay pruebas suficientes, además reiteró que la fiscalía ha cambiado la acusación en varias ocasiones.
PESABAN CASI 1 TONELADA
Además de la pareja, un contador apellidado Jiménez y un directivo de la compañía sospechosa del embarque, de apellido Guzmán, también figuran como imputados. Todos fueron detenidos el 19 de junio de 2009.
Un mexicano de apellido Pozos también fue aprehendido, pero se sometió a un proceso abreviado.
La sección de Estupefacientes del Organismo de Investigación Judicial capturó a Ceciliano en el Aeropuerto Juan Santamaría, cuando pretendía viajar a México.
Un trabajo en conjunto con las autoridades costarricenses y la policía de Yucatán descubrió el cargamento de casi 1 tonelada de cocaína oculta dentro de los 97 tiburones congelados que fueron exportados en un barco.
El primer cargamento fue descubierto el 2 de febrero de 2009 en Yucatán, México, y el segundo en mayo del mismo año.
Los contenedores con escualos iban dirigidos a la empresa Tenería del Caribe Manufacturera, en Jalisco, que manufactura calzado, carteras y maletines con piel de tiburón.
Los jueces Geovanny Hernández, Marco Jiménez y Nancy Fernández escucharán a 25 testigos y se espera que el juicio concluya el 26 de julio.
Los imputados permanecen en libertad, deben firmar cada 15 días y no pueden abandonar el país mientras el debate esté en desarrollo.