Sector turístico preocupado; urgen mejoras en infraestructura
Ya se conoce la fecha en que el aeropuerto de Liberia, Daniel Oduber Quirós, alcanzará su límite de crecimiento: el año 2030. Antes de ese momento, la provincia guanacasteca deberá buscar una alternativa para recibir a la gran cantidad de turistas que disfrutan de sus bellezas cada temporada.
Así lo confirmó César Jaramillo, gerente de Coriport, administrador de la terminal aérea, quien aseguró que diariamente llegan entre 14 y 44 vuelos provenientes de distintas partes del mundo, así como de suelo nacional. Sin embargo, por más que se conoce cuándo dejará de crecer, su capacidad máxima se mantiene como una incógnita, ya que, de acuerdo con la administración, poco a poco se irán haciendo trabajos que expandirán dicho límite.
“No lo vemos en términos de cifras”, externó Jaramillo ante consulta de DIARIO EXTRA. Según indica, lo único que se sabe es que dentro de seis años no crecerá más y que la capacidad de la infraestructura para soportar el crecimiento de pasajeros se pone a prueba todas las temporadas altas.
El director de dicho aeródromo comentó que en la actualidad se encuentran en proceso dos obras importantes. Una ampliación de 4.000 metros cuadrados en las salas de abordaje, así como la edificación de una terminal ejecutiva para aviones privados.
No obstante, la estructura tiene una serie de requerimientos “más apremiantes”, según comenta Jaramillo, dentro de las que se encuentra poder contar con todo el personal estatal necesario, tanto de Policía Migratoria, como agentes de aduanas, entre otros.
“Esto contribuiría a agilizar los procesos de los visitantes producto de los nuevos proyectos inmobiliarios qué se desarrollan en la zona”, afirmó.
¿LLEGARÁ AL 2030?
Cada año se movilizan 1,6 millones de turistas por el Daniel Oduber, de allí su importancia estratégica para la industria turística del país, sobre todo la del Pacífico Norte.
A pesar de su trascendencia, el sector resiente que las mejoras en el aeropuerto no están a la altura necesaria para atraer a más visitantes y retener a los que ya llegan por medio de esta terminal.
Martin Espinoza, turoperador de la zona, afirma que la infraestructura ya está colapsada. “En temporada alta los visitantes duran más de dos horas para poder salir del aeropuerto, esa es una pésima primera impresión que se llevan del país”.
Por su parte Rafael Sánchez, director de la Asociación de Aerolíneas (ALA), relató que: “la infraestructura está lejos de ser la ideal, pero es suficiente para el tráfico actual”, aunque descartó que con el crecimiento actual la infraestructura presente no tendría la capacidad de absorber dicho aumento.
Sánchez agregó que el mayor riesgo consiste en que, tras un aterrizaje, se produzca un levantamiento y se tenga que cerrar la terminal por un tiempo. “Por esta razón urge una mejora en la infraestructura”, sentenció.
COSTOSOS PROBLEMAS
Las aerolíneas dan señales que se contradicen. Por una parte, una empresa norteamericana anunció que comenzará operaciones en la terminal en los próximos meses, con un vuelo procedente de Boston, Massachusetts.
Pero, por otra parte, la suiza Edelweiss comunicó que piensa suspender tres de sus llegadas al país próximamente, debido a los problemas en los que se encuentra la pista de aterrizaje, según explica a este medio Roger Rudolph, representante de la línea aérea en Costa Rica.
De acuerdo con sus apreciaciones, esa pista tiene únicamente 18 PCN (siglas en inglés del número de clasificación del pavimento) cuando la medida óptima es 90 PCN, de acuerdo con la Organización Internacional de Aviación Civil.
Tal y como lo establece la normativa, dependiendo del nivel de PCN, se conoce el tipo de aviones que pueden aterrizar en la rampa de rodaje, los cual está definido según la clasificación de aeronaves (ACN).
“Una pista con bajo PCN podría provocar un accidente de consecuencias desconocidas”, manifestó Rudolph, quien agregó que su compañía ha tenido problemas por la cantidad de aves en la zona, y eso provocó un gasto de más de $5 millones (más de ¢2.577 millones), al punto que la aerolínea demandará al Estado.
DEBATE EN LA ASAMBLEA
En marzo de este año, se aprobó la licitación para rehabilitar la pista de aterrizaje, por medio de un cuestionado proceso de licitación que a la larga le costó el puesto al exjerarca del Ministerio de Obras Públicas y Transportes (MOPT) Luis Amador, pero hasta la fecha las obras no han iniciado.
Por más que el contrato con la empresa MECO fue cuestionado, debido a que el Poder Ejecutivo se valió de un decreto de emergencia para aprobarlo por la vía rápida, la licitación siguió su curso.
Ante eso, el pasado 7 de octubre el actual titular del MOPT, Mauricio Batalla, explicó ante la Comisión de Legislativa de la provincia de Guanacaste que el problema radica en la necesidad de un asfalto especial.
Esa afirmación fue cuestionada por la diputada frenteamplista Sofía Guillén, quien aseveró que desde el contrato original se debía instalar el asfalto original, por lo que ya debieran estar concluidas las obras.