A partir de ahora los adultos mayores que utilicen la “Tarjeta Ciudadano de Oro” para acceder al transporte público deberán identificarse cada vez que el chofer del autobús se lo solicite, esto ante el aumento de su uso indebido, según advirtió el Banco Central de Costa Rica (BCCR).
La entidad financiera informó que mediante el monitoreo de cámaras se ha observado a personas no mayores de 65 años utilizándolas para obtener el subsidio, ya sea de familiares o de terceros.
“Los usuarios del transporte público deben tener en cuenta que, según el esquema actual de definición de tarifas del transporte público, este uso indebido conlleva un mayor costo para el resto de los usuarios, ya que son estos quienes asumen el descuento que se les brinda a los adultos mayores”, advirtió el ente emisor.
La decisión de verificar que quien utilice el plástico sea el dueño fue bien recibida por el sector autobusero.
Silvia Bolaños, presidenta de la Cámara Nacional de Transportes (Canatrans), comentó a Diario Extra que han recibido denuncias por parte de choferes de buses.
“Hemos recibido algunas quejas de afiliados respecto al uso indebido de la tarjeta. A veces es el adulto mayor quien se la facilita a otras personas que no reúnen los requisitos y en otras ocasiones son personas que la toman con o sin su consentimiento”, expresó.
El mal uso de los medios de pago digitales podría llevar a un debilitamiento del sistema electrónico porque genera desconfianza en el sector autobusero, por eso la presidenta de Canatrans espera “que la población entienda que tiene
que hacerse responsable del uso de la tarjeta y que se debe seguir avanzando en el proceso de masificación de pagos digitales”.
Actualmente el sistema de pago emite una luz amarilla cada vez que se utiliza un plástico para personas de la tercera edad, alerta que, junto con la revisión de las cédulas, permitirá verificar que el pasajero sea el dueño de la cuenta.